Los partidos del bloque de la izquierda trabajan con “prudencia” y “discreción” para alcanzar el próximo jueves una mayoría progresista en la Mesa del Congreso de los Diputados, sin valorar en principio la propuesta de Coalición Canaria de elevar a la Presidencia a un diputado del PNV.

La portavoz del PSOE, Pilar Alegría, defendió ayer que la Mesa del Congreso debe reflejar el resultado “mayoritariamente progresista” de las elecciones del pasado 23 de julio y ha apelado a la “prudencia y el diálogo” a más de 48 horas de la constitución de las Cortes.

Alegría declinó dar nombres para presidir el Congreso de los Diputados y el Senado, porque “las escaleras hay que subirlas de una manera pausada”, escalón a escalón. “Ahora estamos todavía a 48 horas para constituir las cámaras”, señaló la ministra, que no quiso entrar a valorar la propuesta del presidente canario, Fernando Clavijo (CC), de que la Cámara Baja esté presidida por un diputado del PNV.

Quien sí se pronunció, y no a favor, fue la vicepresidenta primera del Gobierno en funciones, Nadia Calviño, que defendió que sea una persona del Partido Socialista la que presida el Congreso, aunque apuntó que “las negociaciones están en marcha” y “se están produciendo “negociaciones constantes”.

La Ejecutiva del PSOE se reunirá mañana para decidir los candidatos a las mesas del Congreso y el Senado y los portavoces de ambas cámaras.

Por su parte, la portavoz de Sumar en el Congreso, Marta Lois, expresó su confianza en que esta formación política tenga un “papel importante” en la Mesa de la Cámara Baja la próxima legislatura y ha insistido en que están hablando con “discreción” para que las negociaciones lleguen “a buen puerto”.

Además, confirmó que está habiendo contactos con los independentistas de Junts para lograr que se configure una Mesa del Congreso de mayoría progresista que, en su opinión, debería estar presidida por el PSOE. Eso sí, subrayó que estas negociaciones se están llevando a cabo de forma “discreta” porque considera que los acuerdos son más factibles en “conversaciones a puerta cerrada y de confianza mutua”, evitando globos sonda. 

Lois recalcó que los ciudadanos ya votaron el 23-J y no fue para conformar una mayoría de PP y Vox, sino progresista y ahora toca que los representantes políticos “hagan su trabajo” y alcancen acuerdos en esa línea.

Según explicó , “desde el minuto cero” Sumar se puso manos a la obra y está hablando con todos los grupos políticos, también con Junts, para ese primer objetivo de elegir el día 17 “una Mesa que represente lo que la gente ha votado”, que es la mayoría progresista. 

Sobre la propuesta de Coalición Canaria -proponen ceder la Presidencia al PNV u otra minoría-, apostó por que la Presidencia del Congreso “refleje la proporcionalidad” de los resultados del 23-J, por lo que debe corresponder a la primera fuerza progresista, en este caso el PSOE.

Además, la secretaria de Organización de Podemos, Lilith Vestrynge, avanzó las propuestas de su partido para la negociación de la nueva Mesa, entre las que figuran que no se acredite “a supuestos medios de comunicación que difunden mentiras y discursos de odio” y retirar las pinturas y bustos de Juan Carlos I de su exhibición pública de los pasillos del Congreso.

A través de sus redes sociales, el ex presidente de la Generalitat y fundador de Junts, Carles Puigdemont, pidió “paciencia, perseverancia y perspectiva” en las negociaciones y advirtió de que, a medida que se acerca el día 17, “crece el nerviosismo” y “se disparan las especulaciones”.

La paciencia reclamada por Puigdemont se prolongará hasta el mismo día de la constitución del Congreso, cuando Junts celebre una reunión telemática extraordinaria de su Ejecutiva, poco antes de la sesión parlamentaria, para decidir la posición de sus diputados en torno a la composición de la Mesa, según confirmaron a Efe fuentes del partido.

En la convocatoria de la reunión realizada por Jordi Turull, este insistió en la necesidad de que los líderes, portavoces y negociadores guarden silencio sobre el desarrollo de las negociaciones, algo que según las mismas fuentes es un requisito exigido por Puigdemont.

Por su parte, EH Bildu aseguró que la idea de que un diputado del PNV pueda presidir el Congreso no existe “ni como posibilidad” y añadió que su grupo está en conversaciones con el PSOE y otras formaciones para conformar una Mesa que refleje la mayoría progresista de la Cámara.

Y el BNG, en boca de su diputado en el Parlamento gallego Luis Bará, calificó de “estrambótica” la idea de Coalición Canaria de que el PNV pueda presidir el Congreso.