Vecinos de San Enrique de Guadiaro critican que el Ayuntamiento elimine un centro de mayores por una iglesia evangelista

Vecinos de San Enrique de Guadiaro denuncian que el Ayuntamiento de San Roque ha adjudicado a dedo a una iglesia evangelista el uso del local público que, anteriormente, albergaba un hogar del jubilado que servía como lugar de reunión para los mayores de la barriada.

Según explican los vecinos, después del confinamiento el anterior adjudicatario decidió no reemprender su negocio y, desde entonces, ha permanecido cerrado hasta hace unos días, cuando tras limpiarlo, una iglesia evangelista lo ha anunciado como su nuevo local de reuniones. "Nuestros mayores están en la calle, tirados en bancos, sin un local habilitado y a ellos, que ya tienen uno cedido, les dan este", denuncia María Ruiz, portavoz de los residentes.

Ruiz detalla que varias familias de la barriada se han interesado en la gestión del edificio con usos semejantes, enfocados a los mayores de San Enrique, recibiendo, según su versión, continuas trabas. "El proceso tardó tanto que se lo adjudicaron a una chica que ya no le interesaba porque montó su propio negocio y, en vez de seguir la lista, se lo dan a dedo a la iglesia evangelista que ya tiene su local cedido", argumenta la portavoz vecinal.

A preguntas de Europa Sur, el Ayuntamiento de San Roque contesta que la cesión de la instalación a la iglesia evangelista es temporal y durará solo hasta que termine el proceso de concesión del local, que está previsto que se reabra como hogar del pensionista. Entretanto, el Consistorio ha llegado a un acuerdo con el pastor para que puedan usarlo como lugar de reuniones y que lo abandonarán una vez se culmine la licitación y vuelva a abrir destinado a los mayores.