Desde los años noventa hasta ahora, la incidencia del cáncer de piel se ha triplicado. La doctora Eugenia Cutillas, jefa de Dermatología de Quirónsalud Murcia, explica que hay más de 100 tipos de cáncer de piel, de los cuales, los más frecuentes son el carcinoma basocelular, el carcinoma espinocelular y el melanoma.  

Estos datos deberían concienciar sobre la prevención, sobre la conveniencia de evitar la exposición al sol, especialmente en niños y en personas con la piel muy clara. También sobre la importancia de acudir a un dermatólogo si vemos, por ejemplo, un lunar que llame nuestra atención. 

Aun así, según diversos estudios, la probabilidad de sufrir un cáncer de piel a lo largo de nuestra vida alcanza el 25%. La buena noticia es que la tasa de supervivencia a cinco años es muy alta, incluso si hablamos del tumor de piel más agresivo, el melanoma. Pero, ¿qué ocurre el día después?

Cambio de prioridades e importancia del autocuidado

Cuando se supera un cáncer de cualquier tipo, el primer reto que tiene la persona afectada es volver a recuperar su vida, sus rutinas. La ayuda psicológica, que ha sido tan importante durante las etapas de diagnóstico y de tratamiento, sigue siendo crucial. 

Por un lado, el miedo a sufrir una recaída, a que la enfermedad vuelva. Por otro, como explica Carmen Barceló, psicooncóloga del Hospital Quirónsalud Málaga, “han cambiado las prioridades y la manera en la que se enfrenta al día a día”. Esto no tiene por qué ser malo de entrada, pero el hecho es que el paciente que se ha recuperado de un cáncer se enfrenta a nuevos retos, como la vuelta al trabajo, vivir con algunas secuelas físicas o la vuelta a una vida social activa, entre muchos otros.

La psicooncología puede aportar la ayuda necesaria para afrontar esta etapa, en la que, comenta Barceló, “cambian las prioridades, los valores, la importancia del autocuidado y la percepción de los detalles que antes podían pasar desapercibidos”.

Spot the Dot, la historia de Marije Kruis

Precisamente el autocuidado, el “querer tu propio cuerpo”, es clave en la vida de Marije Kruis. Su historia, al menos un importante capítulo, empieza hace más de ocho años, una tarde soleada en Viena, cuando estaba tomando algo en una terraza y un amigo le advierte sobre un lunar sospechoso en su pierna.

Tomo la decisión, acertada, de acudir a un dermatólogo, y ese lunar, esa ancha en la piel que hasta entonces no había tenido importancia resultó ser un melanoma avanzado. Desde el primer momento su médico le dejó claro que el melanoma es un tipo de cáncer agresivo, que puede causar metástasis y “no quedarse solo en la piel”. Y desde el principio, Kruis se cuestionó por qué no había sabido qué mirar, qué buscar para detectar este problema.

Por eso, Marije Kruis funda en el año de 2015 Spot the Dot, una ONG que trabaja con pacientes y dermatólogos, pero también con otros colectivos, como artistas y atletas, para concienciar sobre la verdadera importancia del melanoma y de otros tipos de cáncer de piel, que en muchos casos se banaliza.

Spot the Dot, una frase que se puede traducir a castellano como “encuentra el punto, el círculo”, simboliza la relevancia de las revisiones cutáneas, de la autoexploración y el autocuidado, para localizar posibles lunares sospechosos. Favorecer el diagnóstico temprano es un complemento lógico a la prevención, que tampoco hay que olvidar.

"Love your body", el autocuidado en imágenes

Como parte de la actividad de Spot the Dot, y en colaboración con la Clínica Dermatológica Internacional (CDI), llegó a España la exposición fotográfica “Love your body”, una serie 21 obras del fotógrafo austriaco Max Manavi-Huber, seleccionadas personalmente por Marije Kruis, con el objetivo de concienciar sobre el cáncer de piel, y de fomentar la autoexploración del cuerpo, especialmente entre los más jóvenes.

El doctor Pedro Rodriguez, dermatólogo de CDI y del Hospital Ruber Internacional, actuó como comisario de la exposición. A su juicio, las fotografías de Manavi-Huber muestran la relación del arte y la piel y expresan de forma clara un mensaje: ama tu propio cuerpo y vigílalo.

Por fortuna, como saben por experiencia en la Clínica Dermatológica Internacional, el cáncer de piel es una de las formas de cáncer más tratables. Existen tratamientos como la cirugía de cáncer de piel con control microscópico, conocida como cirugía de Mohs, por el hombre de su inventor. Pero paralelamente hay que seguir trabajando en la concienciación sobre la gran ventaja que supone un diagnóstico precoz.