La rosuvastatina es un medicamento del grupo de las estatinas, que se usan para tratar a pacientes con niveles de colesterol y triglicéridos altos que pueden provocar problemas como la arterioesclerosis, que puede provocar un estrechamiento de las arterias y disminuir el riego, llevando a un aumento del riesgo de sufrir un accidente cardiovascular u otro tipo de dolencia provocada por la falta de riego sanguíneo a los músculos.

Las estatinas impiden que el hígado genere colesterol malo (LDL) y los triglicéridos, permitiendo también un aumento del colesterol bueno (HDL), disminuyendo el riesgo de que se acumulen los primeros en las arterias.

Este medicamento es genérico, por lo que puede encontrarse con el nombre del principio activo (rosuvastatina) y el del laboratorio que lo pone a la venta. Y ha saltado a los titulares después de que la Agencia Española del Medicamento retirara dos lotes de la circulación durante el mes de febrero.

¿Quién puede tomar este medicamento?

Rosuvastatina es pautada cuando la combinación de una dieta saludable y una vida activa no es suficiente para la disminución del colesterol en el paciente. Puede ser recetado para pacientes adultos, así como adolescentes y niños que tengan más de 6 años de edad.

Se usa para tratar la hipercolesterolemia primaria, la dislipidemia mixta y la hipercolesterolemia familiar homocigótica. También para la prevención de accidentes cardiovasculares cuando se trata de un paciente de alto riesgo.

Este medicamento está contraindicado para algunos pacientes:

• Aquellos que tengan hipersensibilidad a la rosuvastatina o a otro de los ingredientes del medicamento.
• Aquellos que tengan enfermedades hepáticas activas.
• Que sufran de insuficiencia renal grave.
• Que sufran miopatía (enfermedad muscular).
• Que tengan un tratamiento concomitante con ciclosporina.
• Que se encuentren embarazadas, en período de lactancia o en edad fértil y que no estén empleando los métodos anticonceptivos adecuados.

La dosis de 40 mg está contraindicada para personas que:

• Tengan predisposición a la miopatía o rabdomiólisis.
• Sufran de insuficiencia renal moderada.
• Tengan hipotiroidismo.
• Tengan en su historial familiar de alteraciones musculares hereditarias.
• Sufran de alcoholismo.
• Tengan un historial previo de toxicidad muscular con otro inhibidor de la HMG-CoA reductasa o fibrato.
• Usen concomitante de fibratos.
• Sean de origen asiático.

Es importante que su médico tenga en cuenta sus antecedentes clínicos, así como tratar qué medicamentos y complementos toma habitualmente, para asegurarse de que ninguno interactúa con la rosuvastatina y hacer cambios si es necesario.

Posibles efectos secundarios

El tratamiento con rosuvastatina puede producir efectos adversos en algunas personas. Los efectos adversos frecuentes son los siguientes:

• Diabetes mellitus.
• Dolor de cabeza.
• Mareos.
• Estreñimiento.
• Náuseas.
• Dolor abdominal.
• Mialgia.
• Astenia.

De forma poco frecuente pueden darse casos de prurito, exantema o urticaria. El listado completo de los efectos secundarios se puede encontrar en el prospecto del medicamento. Es importante poner en conocimiento de su médico los efectos secundarios que se sufran, independientemente de si están o no listados.