La incontinencia urinaria es la pérdida involuntaria de orina y normalmente estaba asociada a la vejez o como parte de una secuela que les había quedado a las mujeres que habían tenido niños debido al debilitamiento de la zona y del suelo pélvico que pierde tonificación con el paso de los años y, por tanto, momentos de escape de la orina. 

Esto crea un malestar físico y mental, así como también inseguridades en la persona quien siente vergüenza por la situación y puede limitarle la vida social o incluso generar depresión. La incontinencia urinaria es una afección que suele pasarle a mujeres a partir de los 50, que se agrava con la llegada de la menopausia, pero también hay casos de hombres. Concretamente uno de cada cuatro hombres a partir de los cuarenta años puede sufrir incontinencia urinaria por diversas razones.

Tipos de incontinencia urinaria

Es importante que haya un correcto diagnóstico de esta patología con la idea de que se ponga el tratamiento adecuado. Para ello, hay que detectar qué tipo de incontinencia es y cómo podría tratarse. En este caso, vamos a nombrar tres tipos:

1. Incontinencia de esfuerzo: Ocurre cuando se produce una pérdida involuntaria de orina al realizar actividades que ejercen presión sobre la vejiga, como reír, toser, estornudar, levantar objetos pesados o hacer ejercicio. Suele estar relacionada con debilidad en los músculos del suelo pélvico.

2. Incontinencia de urgencia: También conocida como vejiga hiperactiva, se caracteriza por una necesidad repentina e intensa de orinar, seguida de una pérdida involuntaria de orina antes de llegar al baño. Puede estar asociada con contracciones musculares involuntarias de la vejiga.

3. Incontinencia urinaria postmiccional: Por su configuración anatómica, este tipo de incontinencia suele afectar a los hombres. Se trata de la pérdida de una pequeña cantidad de orina después de completar la micción que es el proceso de vaciar la vejiga.

Causas por las que se da la incontinencia urinaria

La incontinencia urinaria no siempre está relacionada con la edad y con el deterioro del organismo. Puede haber diferentes situaciones que la provoquen y puede suceder a cualquier edad:

1. Problemas de próstata: El agrandamiento de la próstata, común en hombres mayores, puede comprimir la uretra y causar dificultades para controlar la vejiga.

2. Cirugía de próstata: Algunas intervenciones quirúrgicas en la próstata, como la prostatectomía, pueden dañar los nervios y músculos alrededor de la vejiga, lo que lleva a la incontinencia.

3. Lesiones en la médula espinal: Traumatismos o enfermedades que afectan la médula espinal pueden interrumpir la comunicación entre el cerebro y la vejiga, causando pérdida de control sobre la micción.

4. Envejecimiento: Con la edad, los músculos del suelo pélvico pueden debilitarse, lo que puede provocar incontinencia urinaria.

5. Obstrucción de las vías urinarias: La obstrucción de las vías urinarias debido a cálculos renales, tumores u otras condiciones puede causar problemas de control de la vejiga.

6. Enfermedades neurodegenerativas: Condiciones como la enfermedad de Parkinson o la esclerosis múltiple pueden afectar el funcionamiento de los nervios que controlan la vejiga.

7. Infecciones del tracto urinario: Las infecciones pueden irritar la vejiga y causar incontinencia temporal.

8. Consumo de ciertos medicamentos: Algunos fármacos, como los diuréticos, pueden aumentar la frecuencia urinaria y contribuir a la incontinencia.