Rivaroxaban es un medicamento que pertenece al grupo de los anticoagulantes, que se receta en adultos para la prevención de ictus y embolia sistémica en pacientes con fibrilación auricular no valvular que presenten algún factor de riesgo (como ictus previos, hipertensión o insuficiencia cardíaca congestiva).

Este medicamento se usa también para la prevención de la trombosis profunda y la embolia pulmonar en adultos y para que estás no vuelvan a ocurrir. También puede ser recetado para menores de 18 años para tratar el tromboembolismo venoso y evitar su reincidencia.

¿Qué se debe saber antes del tratamiento con rivaroxabán?

Este medicamento tiene una serie de contraindicaciones que se refieren a los siguientes casos:

• Si se tiene hipersensibilidad al rivaroxabán o a cualquiera de los ingredientes del medicamento.
• Si se tiene una hemorragia activa que sea clínicamente significativa.
• Si se tiene una lesión o enfermedad que puede desembocar en una hemorragia mayor. Es el caso de úlceras gastrointestinales, neoplasias malignas con alto riesgo de hemorragia, traumatismo cerebral o espinal reciente o algunas cirugías mayores, entre otras.
• Si se tiene un tratamiento acompañante en el que se usa otro anticoagulante como la heparina.
• Si se tienen hepatopatías asociadas a coagulopatía y a riesgo relevante de sufrir hemorragia.
• Si se encuentran embarazadas o en período de lactancia.

Según las características de su caso particular su médico indicará la dosis adecuada y el tiempo del tratamiento. También tendrá en cuenta las afecciones previas y su historial clínico, así como deberán tratarse los medicamentos y complementos con o sin receta que toma habitualmente para saber si puede tomarlos con normalidad o si se han de cambiar las pautas. 

Posibles efectos secundarios

El tratamiento con rivaroxabán puede producir efectos adversos en algunos pacientes. Los efectos secundarios que este medicamento puede producir con más frecuencia son los siguientes:

• Anemia.
• Mareos.
• Dolor de cabeza.
• Hemorragia ocular.
• Hipotensión.
• Hematoma.
• Epistaxis (hemorragias nasales).
• Hematomas.
• Sangrado de encías (gingival).
• Hemorragias del tracto gastrointestinal.
• Hemorragia del tracto urogenital.
• Insuficiencia renal.
• Aumento de la creatina en sangre.
• Aumento de la urea en sangre.
• Dolor gastrointestinal y abdominal.
• Dispepsia.
• Náuseas.
• Estreñimiento.
• Vómitos.
• Diarrea.
• Aumento de los niveles de las transaminasas.
• Prurito.
• Exantema.
• Equimosis.
• Hemorragias cutáneas y subcutáneas.
• Dolor en las extremidades.
• Fiebre.
• Edema periférico.
• Disminución general de la fuerza y la energía.
• Hemorragias después de una intervención quirúrgica.
• Anemia postoperatoria.
• Contusión.
• Secreción de la herida.

En caso de sufrir algún tipo de efecto adverso, se encuentre en el listado, en el prospecto (donde se pueden encontrar todos los efectos y su frecuencia) e incluso de presentar alguno que no se encuentre en ninguno de estos, se debe poner en conocimiento de su médico o farmacéutico para que le aconsejen. El prospecto completo se puede encontrar en la caja del medicamento o buscar en formato digital desde la web de CIMA.