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Un manifestante muere de un disparo en Siria

  • Las fuerzas del régimen de Bashar Al Asad están atacando a los ciudadanos que recorren Damasco en protesta pro la situación del país.

Una persona murió anoche en la provincia de Rif Damasco, en el suroeste de Siria, tras recibir los disparos de las fuerzas de seguridad mientras reprimían una protesta, explicó este domingo el activista opositor Hozam Ibrahim.

Perteneciente a los Comités de Coordinación Local, Ibrahim precisó que la persona murió en el hospital, adonde había sido trasladado para tratarse de las heridas después de que las fuerzas del régimen abrieran fuego contra los manifestantes en la localidad de Sakba (Rif Damasco).

Durante la noche también se sucedieron enfrentamientos en la región central de Homs y en las cercanías de Idleb (en el norte).

En esta última zona, unos treinta soldados desertaron del ejército sirio y se enfrentaron a las tropas del régimen, que bombardearon las casas de los habitantes que apoyaban a los desertores sin que hasta el momento se hayan reportado víctimas, añadió el opositor.

Mientras, en la ciudad de Alepo -la segunda más grande de Siria- se registraron protestas que reclamaban la caída del presidente sirio, Bachar al Asad.

En imágenes difundidas por internet, se observa la entrada violenta de las fuerzas de seguridad a la mezquita de Abdelkarim Rifai, ubicada en la capital Damasco, donde el imán resultó herido por los golpes.

Este ataque se produjo durante la "Leilat al Qadr" o noche del destino, típica del ramadán durante la cual los musulmanes abarrotan las mezquitas hasta la mañana para conmemorar lo que consideran el inicio de la revelación del Corán.

Por su parte, el Observatorio sirio de Derechos Humanos informó de que militares y miembros de seguridad intervinieron hoy en los pueblos de Ayach, Jarita y Hawayej, todos ellos en la provincia de Deir al Zur (este).

De acuerdo a testimonios recogidos por la organización, las fuerzas del régimen detuvieron a decenas de activistas, entraron en sus casas y quemaron algunas de ellas.

Esta situación se repitió en la provincia de Idleb, donde las intervenciones se saldaron con la detención de al menos nueve personas.

El régimen sirio sigue así reprimiendo por la fuerza las protestas que se iniciaron en marzo pasado en unos enfrentamientos que se han cobrado la vida de al menos 1.939 civiles y 451 miembros del ejército y las fuerzas de seguridad sirias, según cifras del Observatorio.

Como parte de los esfuerzos internacionales para detener el derramamiento de sangre en Siria, la Liga Arabe decidió enviar a su secretario general, Nabil al Arabi, a Damasco con una propuesta para intentar solucionar la situación que atraviesa el país.

Además, en Arabia Saudí, las autoridades liberaron a 164 ciudadanos sirios detenidos desde hace días en la capital Riad por manifestarse a favor de la decisión del rey Abdalá bin Abdelaziz de llamar a consultas al embajador saudí en Damasco, indicó el grupo de derechos humanos.

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