Verdemar detecta pesca ilegal de atún rojo en aguas de la Bahía de Algeciras
Los ecologistas añaden que se usa a los delfines para guiarse, lo que les provoca estrés
Verdemar-Ecologistas en Acción ha alertado del grave impacto que se está produciendo a dos especies "amenazadas y fuertemente protegidas" como el atún rojo y los delfines en la Bahía de Algeciras, donde desde este verano se ha instalado entre los pescadores deportivos el empleo de la técnica popping para pescar túnidos ilegalmente, ya que el cupo de esta pesquería está cerrado desde finales de julio y, además, los ejemplares capturados son generalmente de menor tamaño al permitido por la legislación internacional.
Alfredo Valencia, portavoz del colectivo ecologista en el Campo de Gibraltar, asegura que tienen numerosos casos documentados de esta práctica que desarrollan en mayor medida barcos deportivos gibraltareños y en menor cantidad españoles. Su intención es denunciar y trasladar la información recopilada a la Guardia Civil para que intervenga.
Esta técnica se utiliza desde embarcación y el cebo es artificial. Se basa el localizar cardúmenes de atún y lanzar el cebo lo más próximo posible, recogiéndolo a modo de tirones para producir salpicaduras y llamar la atención del pez. Como los atunes rojos se alimentan de peces de los que también se alimentan los delfines, estos barcos "persiguen" a estos animales, a los que utilizan como señal para seguir una captura satisfactoria. Ello produce estrés a los delfines, una especie muy sensible y amenazada, siendo habituales las colisiones, cortes o el enganche con las artes de pesca. Según Valencia, han llegado a contabilizar hasta entre 16 y 18 barcos realizando esta práctica a la vez habiendo provocado la muerte de un delfín.
Incide el portavoz de Verdemar en que desde mediados de julio se está produciendo una situación "desastrosa" en el manejo y regulación de la pesca deportiva del atún rojo en aguas de la Bahía de Algeciras. "Entre otras cuestiones porque quienes realizan esta actividad aprovechan la permisividad de Gibraltar, que carece de regulación frente al atún rojo y frente a los cetáceos y, en consecuencia, se está produciendo un grave impacto", apunta.
En este sentido, detalla que Gibraltar no cuenta con cuota asignada de atún rojo y, además, carece de normas reguladoras de pesquerías recreativas y comerciales. "Algunos aprovechan ese vacío legal y cuando los barcos intentan ser interceptados por los servicios marítimos españoles enfilan a altas velocidades hacia Gibraltar, donde son protegidos por la Royal Gibraltar Police y pueden levantar el pez impunemente y a sus anchas", critican.
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