Los vecinos de los pisos junto al Tenis Club se sienten "desamparados"

Los vecinos de la promoción de Camino Ancho de La Atunara, situada junto al Linense Tenis Club, están muy preocupados ante la sentencia del juzgado de lo Contencioso Administrativo de Algeciras que insta al Ayuntamiento a la demolición de los dos bloques de viviendas y que Europa Sur publicó ayer.

Actualmente las 36 viviendas están ocupadas y la mayoría desde mediados de 2007, a pesar de que el Consistorio no ha entregado aún la licencia de habitabilidad y la luz y el agua de la que disponen los vecinos es de obra.

Palabras como "indignación", "destrozados" y "desamparados" fueron muy repetidas por los residentes, que además aseguraron que la promotora Rosales-Gibraltar "nos ha estado presionando con cortes de luz y agua para que escrituráramos las viviendas", cosa que ya han hecho la mayoría de los propietarios, mientras que otros han llegado a un acuerdo con la empresa y han firmado un contrato como arrendatarios.

Los vecinos destacan que son "familias linenses trabajadoras, aunque ahora son muchos los que están en el paro y están pagando una hipoteca, así que no tienen dinero para meterse en un pleito". Gran parte son parejas jóvenes con hijos pequeños, aunque hay algunos vecinos de mediana edad.

Critican la falta de información recibida por parte de la promotora, el Ayuntamiento, la notaría y las entidades bancarias. "Nadie nos explicó nada del problema que había y además uno no se compra una casa todos los días. Nos dijeron que la licencia de habitabilidad nos llegaría en un mes o dos y eso fue hace más de tres años".

Una de las vecinas destacó que "hemos comprado nuestras viviendas pero nos han engañado y estamos con las carnes abiertas, aunque de aquí no me saca nadie, me tienen que llevar por delante. Si hay lío entre la promotora y el Ayuntamiento es culpa de ellos". En el Registro de la Propiedad también tienen constancia de que estos ciudadanos son los propietarios de estos pisos.

Los vecinos tienen claro que se trata "de un fraude en toda regla" y de "un robo a cara descubierta".

Otro problema añadido es que los bloques carecen de extintores y los ascensores no funcionan porque al no haber entregado el Ayuntamiento la licencia de habitabilidad se supone que nadie debería vivir allí. Además, denuncian que la promotora no ha reparado los desperfectos en los pisos de los vecinos, ni en las escaleras y algunos sufren humedades visibles y de grandes dimensiones aún en el mes de julio y les ha aparecido un agujero en el techo de la cocina. "Un día hasta empezó a gotear la bombilla que tenemos en el salón", explicó una de las residentes, que añadió que "han cogido el dinero y ahora nos están mareando de un lado a otro. El Ayuntamiento nos dice que nos tranquilicemos pero el problema lo tenemos ahí".

También denunciaron la actitud del Consistorio que colocó el decreto de demolición en los portales el pasado 2008 sin avisar.