El Cristo Resucitado se afianza en La Línea con más fieles

El Resucitado salió ayer en parihuelas por algunas de las calles más céntricas de La Línea corroborando que es una tradición popular que cada año gana más fieles entre los ciudadanos.

Cientos de linenses, más que el año pasado, se dieron cita a la salida del Señor de la parroquia de la Inmaculada Concepción, situada en la plaza de la Iglesia, a la una del mediodía con exquisita puntualidad.

Engalanado con claveles rojos y acompañado por la Banda Municipal de Música, el Cristo Resucitado regresó a su templo de la Inmaculada una hora más tarde después de recorrer el paseo de Fariñas y las calles Alfonso X el Sabio, Carboneros, Doctor Villar, Cadalso, San Pablo, Hércules y Real.

Aunque la mañana despertó con algo de viento, éste se fue disipando a medida que avanzaba la jornada. Esta circunstancia, unida al sol que lucía esplendoroso, ayudó a la afluencia de público en la zona centro de la localidad durante la mañana del domingo.

Este paso de gloria que cierra la Semana de Pasión es portado por personas muy vinculadas a la parroquia de la Inmaculada Concepción. Entre ocho y diez personas cargan al Cristo en parihuelas durante su breve recorrido.

El consejo parroquial de la Inmaculada Concepción es el que organiza la procesión del Domingo de Resurrección en La Línea. El padre Juan Valenzuela fue el que recuperó este desfile hace unos cinco años, cuando llevaba algún tiempo sin salir por las calles de la ciudad.

En este sentido, Juan Valenzuela destaca el enorme esfuerzo que se hace cada año desde la parroquia de la Inmaculada Concepción para que la Semana Santa de La Línea de la Concepción cuente con este pequeño desfile procesional.

La imagen del Cristo Resucitado se realizó en los talleres de Olot, pero la parroquia desconoce en qué fecha exacta se llevó a cabo la talla.

Especialmente llamativa es la salida de la imagen de su templo en la plaza de la Iglesia, donde cada año se congregan más personas para ver al Señor.