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Álvaro Lamas, promesa entre fogones

Por segundo año consecutivo un linense se cuela en la preselección del Premio Promesas de la alta cocina de Le Cordon Bleu Tiene 22 años y desde los cinco anda entre platos

Álvaro Lamas, en los fogones de la Escuela de Hostelería de San Roque.
R. Máiquez La Línea

10 de enero 2015 - 01:00

El futuro de la cocina está asegurado en La Línea. Si el año pasado el alumno de la Escuela de Hostelería de San Roque Francisco Martín se colaba en la final del prestigioso Premio Promesas de la alta cocina de Le Cordon Bleu, este año otro linense, Álvaro Lamas, está por ahora entre los 50 candidatos preseleccionados junto a una compañera de estudios, María Dolores Aguilar Contreras.

Álvaro tiene 22 años y estudia segundo curso de Cocina y Gastronomía en la prolífica Escuela de Hostelería de San Roque. A pesar de su edad tiene bastante experiencia y conocimientos sobre la cocina japonesa y marroquí. De hecho hace un año participó en las jornadas marroquíes que cada año organiza el restaurante La guitarra, que se encuentra a la entrada de La Línea.

Para el candidato linense, que aspira a colarse en la fase final, en la que participarán 10 alumnos de hostelería de toda España, la cocina "es algo más que cocinar", tal y como afirma en la carta de motivación que presentó y a Le Cordon Bleu y que le sirvió para estar entre los 50 preseleccionados, de los que 11 son de Andalucía. Para optar a la fase final los candidatos deben elaborar un vídeo preparando una receta de elección libre pero con el pollo como ingrediente principal. La fecha límite para presentarlo es el 4 de febrero. "Aún estamos en la preparación del plato, cómo coger las partes del pollo, como la pechuga... cómo hacer el relleno... hay varias combinaciones posibles pero nada decidido aún".

El futuro chef linense, al que le encantaría montar un negocio de restauración tras viajar por el mundo para conocer los secretos de las distintas cocinas, anda entre platos desde muy pequeño. "Desde los 5 años siempre me ha gustado estar allí con mi madre y meter las manos en todos lados. Parece que fue ahí cuando por ciencia infusa conecté a la perfección con este mundo. También me ayudó mi gran referente, Karlos Arguiñano, gran cocinero y transmisor de lo que es la cocina y lo que se siente", explica en su carta de motivación.

Una vez que Álvaro Lamas entró en la Escuela de Hostería asegura que cumplió su sueño. "Cuando me vi por primera vez vestido de cocinero… Sí, de lo que soñaba desde pequeño, fue una sensación muy grande. Ya en la escuela pude ver lo que sentía y se siente al cocinar de verdad; que cuando se cocina es por lo menos para mí algo relajante, que te centras en eso, y pueden salir cosas maravillosas, porque es como mimar a todos los ingredientes. Tengo gran capacidad de imaginación y creatividad, ya sea para el emplatado, elaboración o la repostería", explica el aspirante.

¿Por qué decidió Álvaro presentarse al concurso de Le Cordon Bleu? "Simplemente por enriquecer mi futuro en la cocina y probar nuevos tipos de cocina. Sé que entrando en el concurso de Promesas de la alta cocina de Le Cordon Bleu iba a tener más futuro en la cocina. Además creo que hay opciones de llegar a la final, la verdad. Estando en la Escuela de Hostelería de San Roque, que tiene muy buena fama y nos preparan muy bien, creo que hay opciones de llegar a la fase final junto con mi compañera de la escuela", afirma.

Una vez que Álvaro haya presentado su vídeo-receta podrá ser votada hasta el 17 de marzo. Se tendrán en cuenta los votos de los internautas y del jurado. Tras esta criba sólo diez candidatos participarán en la gran final, que se disputará en la sede de la escuela de cocina de Le Cordon Bleu, en Madrid, el 16 de abril. El primer premio es una beca del 100% para estudiar un diploma y el segundo, otra beca para estudiar un certificado.

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