Alberto González Amador, pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, se querellará contra la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, y estudia denunciar a la Fiscalía y a la Agencia Tributaria por “revelación de secretos”.

Según adelantó la Cadena Cope, emprenderá acciones legales contra la ministra de Hacienda después de que aludiera a la venta de mascarillas que habría cobrado antes de que esta información fuese publicada por elDiario.es. Además, su equipo jurídico está estudiando presentar otra querella contra la Fiscalía por la nota sobre su actuación con respecto a la denuncia interpuesta contra la pareja de Díaz Ayuso y otras cuatro personas por los presuntos delitos de defraudación tributaria y falsedad documental, que trascendió este martes y según la cual habría defraudado 350.951 euros a Hacienda entre 2020 y 2021 a través de una trama de facturas falsas y sociedades pantalla.

Según la Fiscalía, el propio denunciado reconoció los presuntos delitos fiscales a través de su abogado cuando propuso un pacto de conformidad el pasado 2 de febrero, y aceptaba una sanción penal. Esta propuesta de conformidad “reconocía la autoría del señor González Amador de la comisión de dos delitos contra la Hacienda Pública por el Impuesto sobre Sociedades, 2020 y 2021”, subrayaba la Fiscalía.

A este respecto, el Colegio de la Abogacía de Madrid consideró de “extrema gravedad” la revelación por parte de la Fiscalía Provincial de estas conversaciones.

Así lo indicó el Colegio de la Abogacía en un comunicado en el que informó de que “tomará las medidas pertinentes” en su Junta de Gobierno del lunes.

Este comunicado motivó que el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, se reuniera ayer con el decano del Colegio de la Abogacía de Madrid, Eugenio Ribón, y con la presidenta del Consejo General de la Abogacía, Victoria Ortega. Fuentes fiscales informaron a Efe de que el encuentro se produjo a instancias del fiscal general para aclarar varias cuestiones. Ninguno de los implicados ha querido pronunciarse sobre el contenido de la reunión ni hacer ningún tipo de declaración o aclaración sobre este tema.

Mientras, continúa la trifulca política y la presión de la izquierda para que Ayuso dimita. El ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, consideró que la presidenta de la Comunidad de Madrid, “convive con normalidad con el delito” y ha convertido la región, que siempre ha sido “querida y respetada”, en un “nido de odio, crispación y mentiras”.

“Creo que los madrileños ya se están dando cuenta de que tanta crispación busca evitar que se hable de la incompetencia de las políticas que lleva a cabo”, dijo.