"Prefiero un rival dócil a un equipo herido como la Balona"

El entrenador del Club Deportivo Roquetas, Ramón Florit, presume que mañana para su equipo será "muy difícil" puntuar en el Municipal en el partido que le enfrentará a una Real Balompédica a la que define como "un equipo competitivo, fuerte y en el que su posición en la tabla y su verdadero potencial no tienen mucho que ver".

"Por uno u otro motivo se encuentra en esa situación, pero sabemos que es un buen rival, porque lo tiene más que demostrado", subraya".

El entrenador balear, un hombre muy respetado en el entorno del club almeriense después de haber logrado su primer ascenso a Segunda B, recalca que "ni mucho menos" la Balona es el peor equipo del grupo y recuerda que en el partido de la primera vuelta "incluso pudo ganar" a los suyos porque David Miguélez malogró un penalti en la recta final del encuentro. "A veces nos quedamos sólo con el resultado, pero la Balona tiene argumentos para ganar a cualquiera y lo ha demostrado más de una vez".

"Hay un dato que hay que tener en cuenta, después de tres enfrentamientos con los dos primeros, Cádiz y Poli Ejido, que muchos dicen que son equipos de Segunda A jugando en esta categoría, la Balompédica aún no ha perdido, mientras que nosotros, que ya hemos jugado los cuatro partidos que nos corresponde contra esos dos rivales, no hemos sumado ni un punto", detalla.

Florit asevera que la situación extrema de la Balona, que precisa vencer para seguir con vida juega, en realidad, contra los intereses de sus pupilos. "Yo prefiero un animal dócil a uno herido, que es mucho más peligroso", explica. "Cuando uno viene de ganar igual puede cometer el error de relajarse en un momento determinado, pero cuando sabe que es una de sus últimas opciones para salvar la categoría, tiene que jugar al límite y eso con un equipo como la Balona es un peligro para nosotros".

Con respecto a los suyos, que después de una victoria en cuatro jornadas vuelven a sentir el aliento de los que ocupan zona de descenso, explica: "Sabemos quienes somos, sabemos que hemos estado conviviendo con la zona de descenso catorce jornadas, una de ellas como colista, después de diez semanas muchos nos daban por descendidos y no nos asusta la posibilidad de volver a esos puestos, porque sabemos hasta dónde llegan nuestras limitaciones y que tenemos que convivir con eso si queremos seguir en Segunda B", agrega.

"Somos conscientes de que tenemos que pelear mucho para salvar la categoría y para eso estamos, pero es previsible que pasemos momentos de riesgo, por eso no nos podemos permitir ni un ápice de relajación", insiste.

"Puede que no lleguemos en nuestro mejor momento a este encuentro, porque hemos perdido tres de los últimos cuatro compromisos, pero es cierto que lo hemos hecho ante equipos de la parte alta y es ahora cuando llega lo que podríamos llamar nuestra liga y es cuando no podemos fallar, pero claro, nuestros rivales pensarán lo mismo, que su salvación pasa por derrotarnos a nosotros", reflexiona.

El técnico, que se une a las quejas expresada por su entorno en cuanto a la actuación del colegiado onubense Jesús Martín Santana Ponce en el partido del pasado domingo con el Real Jaén, resta importancia a las ausencias en su formación "porque al final, salvo sorpresa, mi equipo alineará once y el que salga estará en condiciones de jugar, por eso está en la plantilla".

Los efectos de la labor del trencilla, que cumple ocho polémicos años en la categoría, se reflejan en que serán baja por sanción el ex de la Unión Deportiva Los Barrios De Gomar, además de Pepín, Álex Hornillo y Quique Lorenzo y se suma Emilio, por problemas físicos.