La lluvia provoca corrimientos de tierra en los carriles de la campiña
Medio Ambiente traslada a Los Alcornocales una excavadora para retirar las toneladas de barro y piedras que impiden transitar por las pistas de los montes
Los efectos de las últimas lluvias caídas en el término municipal han tenido distintas consecuencias a lo largo y ancho del extenso territorio tarifeño. Así, a los sucesos cotidianos como la inundación de garajes o atascos de husillos, los efectos más devastadores han tenido la campiña como escenario.
En el día de ayer, una máquina retroexcavadora procedía a retirar de un carril que recorre buena parte del Parque Natural de Los Alcornocales varias toneladas de barro y piedras de gran tamaño que cortaron la pista impidiendo su travesía. Los trabajos de retirada de los obstáculos naturales han sido activados por la Consejería de Medio Ambiente a través de la dirección del Parque Natural.
En la zona de Longanilla atravesar la pista de montes era ayer imposible ya que un gran corrimiento de tierra de la ladera que perfila la pista arrojó varias toneladas de tierra, barro, ramas y piedras. A lo largo de toda la pista eran visibles otros derrumbamientos de las lomas contiguas al carril.
Desde la Delegación Municipal de Montes del Ayuntamiento de Tarifa se aseguró que las previsiones meteorológicas y el estado de la tierra apuntan a que en los días sucesivos podrían sucederse nuevos corrimientos. Es por ello por lo que desde el Consistorio se aconsejó a los vecinos extremar la precaución si se tiene que circular por estas pistas.
En la zona de la Torre del Rayo a la espalda del monte La Peña la lluvia propició un aumento del caudal del arroyo que se precipita por la Garganta del Rayo hasta Puertollano y la acumulación de ramaje y follaje en su trayecto que creó una balsa que fue acumulando agua hasta que se desbordó y arrastró violentamente árboles y grandes rocas. A pesar de que existen viviendas cercanas al arroyo la riada no causó daños a éstas ni a las personas que residen en la zona.
Francisco Ríos, vecino del lugar, aseguraba ayer a este diario que la riada provocó un gran estruendo y apuntó además a que no recordaba tanta intensidad en las lluvias desde el año 1970. Curiosamente, el año en que sucedió la recordada riada de Tarifa.
No hay comentarios