Hace unos días, la Asociación Unificada de la Guardia Civil advertía de que los narcotraficantes del Campo de Gibraltar utilizan sus embarcaciones de gran potencia para otro tipo de tráfico, el de seres humanos. También el Gobierno marroquí hablaba de una “colusión entre las redes de tráfico de drogas y las de trata de seres humanos” que es necesario investigar, mientras que el español aseguraba que solo se había detectado algunas vinculaciones por los materiales", pero negaba las relaciones entre el narcotráfico y la inmigración.

 

Un nuevo vídeo viene a reforzar la tesis de los guardias civiles sobre la relación entre ambos tráficos ilegales. Esta misma mañana, en la playa de Belyounech, alguien captaba el momento en el que una semirrígida recogía a un grupo de migrantes para trasladarlos a las costas españolas. Es el inicio de un viaje que se espera acabar en la costa de Tarifa, cerca de tierra, como mostraba el vídeo difundido la semana pasada en el que el piloto de la embarcación conminaba a los ocupantes a saltar al agua de uno en uno, grabándolos.

 

Según fuentes de la zona, es una imagen que se repite a diario en la costa marroquí.