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'Los niños del ferrocarril': un clásico de la literatura infantil inglesa lleno de humor, misterio e intriga

La estantería | Literatura infantil y juvenil

Sus más de cien años no lo han hecho envejecer, sigue siendo un libro fresco con el que disfrutarán y aprenderán los más pequeños

La portada de 'Los niños del ferrocarril'.

¿Qué es un tren? Según el Diccionario de la Lengua Española de la RAE, un tren es un conjunto de vagones arrastrados por una locomotora que circula sobre raíles, usado para el transporte. Para un niño es un juguete, además de un medio de transporte, pero también es un lugar mágico donde se pueden vivir grandes aventuras.

En la literatura tenemos grandes libros que se han escrito sobre el tren o han sucedido en el mismo. Entre las novelas más famosas y luchando por el primer puesto tenemos a Asesinato en el Orient Express de Agatha Christie, Extraños en un tren de Patricia Highsmith, ambas muy recomendables, pero yo prefiero a Anna Karenina de León Tolstói. Pero hoy nos centramos en trenes infantiles. Para conocer su funcionamiento traemos dos libros:

El pequeño libro del tren de Nathalie Choux texto e ilustraciones. Editado por Timun Mas Infantil. Tapas duras, tamaño 17 x 17 cm y con 12 páginas. Es un libro interactivo para bebés con el que se puede realizar acciones como encender los faros del tren, validar un billete o hacer avanzar los vagones gracias a sus cinco mecanismos aptos para manos pequeñas, perfectos para desarrollar la psicomotricidad fina. Cuenta la historia de un viaje en tren para encontrarse con los abuelos, que esperan en el andén de la estación.

Los más pequeños aprenderán vocabulario con animaciones que empiezan desde la cubierta. Recomendado a partir de los 6 meses.

Y El libro de los trenes de Sophie Prénat e ilustrado por Vinciane Shleef de la Editorial S.M. Tapas duras, tamaño 27 x 19 cm y con 14 páginas. Pertenece a la serie de libros El libro de... creada especialmente para niños que se hacen una multitud de preguntas, que son curiosos y que desean aprender mucho del mundo que nos rodea. Además de sus ilustraciones sus páginas son Pop-up que les sorprenderán cada vez que las abran. ¿Cómo es una estación de tren? ¿Quién trabaja en ella? ¿Qué hacen los viajeros? ¿Cómo es un tren por dentro? ¿Quién conduce el tren? ¿Qué es una catenaria? ¿Cómo eran los primeros trenes? ¿Qué tipos de trenes hay? ¿Cuál es el tren que recorre el trayecto más largo? Si quieres conocer las respuestas a todas estas preguntas solo tienes que leer este libro. Recomendado a partir de los 3 años. Tiempo de lectura 30 minutos y muchas horas de juegos.

Y además te presentamos cuatro libros llenos de aventuras en el tren:

El tren saltamontes de Alfredo Gómez Cerdá con ilustraciones de Sandra de la Prada. Editado por S.M. Tapas blandas, tamaño 21 x 14 cm y con 64 páginas. El maquinista Bonifacio, o Boni para los amigos, llevaba varios años conduciendo el mismo tren: el tren de mercancías AJO 24 24. Aunque el tren era igual que otros del mismo modelo, Boni lo prefería a los demás, y tenía la sensación de que el tren también lo prefería a él. Formaban eso que suele llamarse «un buen equipo» Pero un día como otro cualquiera, en medio de una inmensa llanura, el tren AJO 24 24 dio un salto. Boni se habría olvidado por completo de aquel incidente de no ser porque, a los pocos días, el tren volvió a saltar. Fue un salto corto, pero brusco. ¿Quieres saber porque cada día que pasaba, AJO 24 24 saltaba más y más? Tendrás que leer este libro y descubrirás porque parece un saltamontes.

Con este libro podemos trabajar el poder de la imaginación. ¿Cómo podemos ayudar al maquinista? Ante un problema tenemos que buscar una solución, y a problemas extraños soluciones fantasiosas. Recomendado a partir de los 6 años. Tiempo de lectura 45 minutos.

Un tren cargado de misterios de Agustín Fernández Paz e ilustrado por Enjanio. Editorial Anaya. Tapas blandas, tamaño 20 x 13 cm, con 88 páginas. Ana ve pasar el tren todos los días. Es un tren que nunca para, porque donde ella vive no hay estación. Un día el tren se detiene junto a la casa y Ana recibe la invitación de subir en él. Así, descubre que se trata de un tren muy especial. ¿Quieres conocerlo? Pues tendrás que leer esta fantasiosa aventura.

El libro es una gran aventura, con la que podremos trabajar los valores de la amistad, el amor y la lealtad. Ana, la protagonista, va descubriendo en el viaje la diversidad cultural y económica de nuestro mundo. En la descripción de los distintos vagones, podemos apreciar las diferencias económicas, sociales, culturales, de etnias, que existen entre los distintos lugares del mundo. Se describen vagones lujosos junto a otros llenos de pobreza. Recomendado a partir de los 7 años. Tiempo de lectura 1 hora y 30 minutos.

Para los más mayores, Secundaria, recordamos La Bestia de Sofía Nayeli Bazán, de la Editorial S.M. Novela realista, su argumento es la inmigración ilegal de los centroamericanos a Estados Unidos. La protagonista es Andrea, casi una niña, que se ve en la necesidad de emigrar para poder ayudar a su familia. Son 3.328 kms sobre La Bestia llenos de peligros, machismo, hambre, frío, violencia e incluso muerte. Por desgracia, por la política de “caza y expulsión” de migrantes en Estados Unidos, esta novela puede ser muy apropiada para ser leída por nuestra juventud. Recomendada a partir de los 12 años. Tiempo de lectura 2 horas y 15 minutos.

Y por último tenemos a Los niños del ferrocarril de Edith Nesbit. Traducción de Moisés Barcía. Editado por Sushi books. Tapa blanda con solapa, tamaño 21 x 14 cm, con 252 páginas. Es un clásico de la literatura Infantil Inglesa. En el año 1905 se publicó de forma serializada en The London Magazine y su primera distribución como libro fue en el año 1906. Sin embargo sus más de cien años no lo han hecho envejecer, sigue siendo un libro fresco con el que disfrutarán y aprenderán los más pequeños.

Roberta, Peter y Phyllis viven en Londres con sus padres. Es una familia acomodada que tienen una gran casa, aunque los niños prefieren estar en la cocina en compañía de los sirvientes. Ellos eran mucho más divertidos que tía Emma que era una señora vieja y seria. La cocinera siempre estaba de buen humor, cantaba canciones cómicas y la doncella los hacía reír imitando a una gallina o maullando como dos gatos peleándose. Sin embargo, deben abandonar este bello hogar. Su madre lo sabe y para consolarlos les dice que van a vivir en el campo en una linda casita. Su padre ha desaparecido, no saben dónde ha ido, su ausencia es un misterio.

Todas las mudanzas son desagradables, pero esta es especial porque “tienen que jugar a ser pobres”. El viaje a su nuevo hogar lo van a realizar en tren. Ellos nunca se habían montado en un tren, pero a partir de ese momento los trenes se van a convertir en el centro de su nueva vida. Nada más llegar a su destino empieza su aventura. Llegan tarde, está lloviendo, nadie los ha recogido, no tienen llave de su casa, menos mal que la han dejado cerca de la puerta, y lo primero que se encuentran cuando llegan a su nueva casa son ratas. Para colmo de males, tampoco han cenado y no tienen nada con que preparar la cena.

Su nueva casa se llama Tres chimeneas, ya no tienen criadas; es mucho más pequeña, pero está al lado de la estación del tren. La vida de los tres pequeños cambia completamente, tampoco asisten al colegio y todos los días van a la estación que se convierte en el centro de sus juegos y de sus conocimientos. Conocen todos los trenes, su destino, sus horarios y sus nombres: el Gusano de Wantley, el Terrible Viajero de la Noche y sobre todo el Dragón Verde, donde viaja el caballero anciano. También tenemos unos personajes secundarios como el mozo de las maletas o el jefe de la estación a la que los niños describían su oficina como “un gran Templo”.

Con este libro entrañable sobre la inocencia infantil podemos trabajar la unión entre los hermanos, la superación de los problemas, la lucha por la justicia, la evolución de la infancia a la adolescencia, la empatía… Tampoco nos podemos olvidar de la creación literaria, la madre es poeta, le gusta escribir poesía a sus hijos, además intenta vender sus escritos y con el dinero que consiga paliar un poco su situación. Pero no podemos olvidar que es un libro de aventuras, donde las locomotoras pueden ser “Dragones disfrazados”, con una buena dosis de humor. Recomendado a partir de 10 años. Tiempo de lectura 5 horas y 15 minutos.

Los pequeños lectores recomiendan

Fernando López Gil, alumno de 2º de ESO: “Los trenes siempre me han gustado, además de un medio de transporte cómodo, puedes hacer amigos, esa fue la primera razón por la que elegí este libro y realizar su crítica, pero después descubrí una novela juvenil llena de aventuras. Me encanta cuando descubren que el tren puede descarrilar. Cada capítulo parece como un episodio de una serie, se desarrolla de forma independiente con la solución del problema, pero enlazando cómodamente con el siguiente. También me gustan mucho las descripciones sobre todo cuando personifica a las locomotoras y le da vida como si fueran seres y no máquinas. Los tres hermanos protagonistas tienen el gran don de hacerse amigos de todo el mundo, y cada uno de ellos tiene una personalidad propia.”

Actividades con su lectura:

Como siempre las realizamos en tres momentos.

Autoría

Edith Nesbit. Londres. Deseaba ser poeta, pero se dedicó a la literatura infantil en la que tuvo un gran éxito desde sus primeras publicaciones. También publicó novelas de terror y románticas para adultos, poesía, propaganda socialista, obras de teatro y reseñas periodísticas. Publicó unos 40 libros para niños, entre novelas, libros de cuentos y álbumes ilustrados. Entre sus libros destacamos: Los buscadores de tesoros, Cinco niños y esto, Historia de un amuleto, El fénix y la alfombra, Historias de Dragones y El castillo encantado.

Ficha literaria

Los niños del ferrocarril. Autoría de Edith Nesbit

Traducción de Moisés Barcia.

Editorial: Sushi books. Pontevedra

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