La casa y el trabajo van sobre ruedas
Las caravanas de los feriantes recorren España a partir de la primavera. Pese a la aparente escasa capacidad, en el interior cabe todo lo imprescindible para una vivienda
Comienzan en la Feria de Abril de Sevilla y recorren la geografía española hasta el día de Todos los Santos. La vida de los feriantes transcurre sobre ruedas, de aquí para allá, con la casa a cuestas. Rafael Bustos y Sofía Carrasco son un joven matrimonio de feriantes venidos desde Santa Cruz de Mudela, en Ciudad Real, e instalan allá donde van un puesto de juguetes donde el rango de productos va desde los de primera calidad hasta los más sencillos, los justos para colmar el capricho repentino de un niño.
Bustos se crió en una caravana de Feria y su negocio alcanza ya la cuarta generación que comenzara su bisabuelo con un puesto ambulante de cuchillería y navajas, un bien muy habitual a la venta a principios del siglo XX en las ferias ganaderas y que aún tiene su parcela de negocio en La Mancha, no así en Andalucía.
De hecho, el perfil del cliente difiere en función de la región donde se eche el freno de mano de la caravana. "En la zona del Levante y Murcia hay mucha tradición juguetera. En Andalucía reclaman un juguete menos costoso", destaca Bustos. Su mujer, Sofía Carrasco, añade que la tradición de regalar juguetes en otras zonas de España durante las ferias se equipara con el día de Reyes Magos. "La gente pregunta a los niños ¿qué quieres que te ferie?", señala. Una derivación lingüística suficientemente elocuente.
Bustos y Carrasco, así como un empleado, se desplazan en dos vehículos y un remolque donde llevan todo lo necesario para pasar medio año fuera de casa. Sin embargo, contrasta el hecho de recorrer buena parte de la piel de toro con el cuentakilómetros. "Hago sólo unos 10.000 kilómetros por temporada. Y soy de los que más hace por mi ruta porque los hay quienes no salen siquiera de la provincia", señala Bustos, quien aclara que los días de ruta son una vez por semana -la duración media de una Feria- y concluye su devenir de temporada en Gerona (a primeros de noviembre) por tradición familiar, por ser una parada que hacían todos sus antecesores en el negocio. A Los Barrios vienen desde 1992 -primero él sólo, de soltero- aunque este año reconocen que han encontrado cierta desorganización a la hora de resolver algunos problemas que surgieron sobre la marcha el jueves.
Pero, ¿cómo se vive en una caravana? En el caso de Bustos y Carrasco, sus dos vehículos cuentan con la particularidad de acoger la mercancía en sólo un lateral exterior que hace las veces de almacén. Como la práctica mayoría de las caravanas, la suya se amplía desde los 2,5 metros de anchura a casi el doble cuando están estacionados gracias a un compartimento extensible. Así se consiguen 25 metros cuadrados donde hay espacio para un dormitorio completo, un baño y una zona mixta de estar y cocina que tiene microondas, lavadora y agua corriente. Una gran evolución en sólo 30 años. No falta un detalle, incluso el Marca encima de la mesilla junto al sofá. "Todo tiene que ser a medida, pero tenemos las mismas comodidades que en un hogar", detalla Rafael, quien confiesa que durante el invierno su vivienda en Santa Cruz de Mudela le queda "grande" salvo por el tamaño de la televisión, apunta su esposa.
Está claro que, como en cualquier otro sector de la automoción, hay vehículos para todos los gustos y precios. Un convoy de tipo medio, como el que desplaza a este matrimonio y sus empleados, supera fácilmente los 70.000 euros. Pero los hay de hasta 300.000 ya que van tirados por un camión de gran tonelaje y pueden alcanzar los 70 metros cuadrados de superficie útil, más que muchos apartamentos y estudios.
"A veces no se valora el trabajo del feriante por parte de las autoridades. Reconozco que al principio el ritmo es difícil. Sobre todo arrancar cada primavera", añade Carrasco. Y aunque Bustos se muestra muy feliz con su vida sobre ruedas, tiene claro que las vacaciones son con los pies en suelo firme. "A un hotel, de cuatro estrellas para arriba y a vivir la vida. Que para eso nos vamos de vacaciones en invierno", sentencia jocoso.
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