Cepsa recupera el arroyo Madrevieja donde anidan 115 especies de aves

Cepsa eligió el día de ayer, víspera del Día Internacional del Medio Ambiente, para inaugurar uno de sus proyectos más mimados: la Estación Ambiental Madrevieja, un centro de investigación y educación ambiental que ocupa una extensión de 20 hectáreas en el término de San Roque.

Con el objetivo de recuperar la biodiversidad en la zona, la compañía impulsó un importante y ambicioso proyecto que conllevó entre otras medidas, la creación humedales, únicos de la Bahía de Algeciras de agua dulce. Esta salvedad lo hace muy singular y ha permitido la rápida implantación y continuidad de especies de flora y fauna. Así, se pueden observar hasta 115 especies de aves.

El director de la Refinería Gibraltar-San Roque, Ramón Segura, manifestó la satisfacción por la experiencia que se inició hace varios años. "Lo que hoy se inaugura es algo espectacular desde el punto de vista de la biodiversidad de especies. Es una actuación en línea con la responsabilidad de Cepsa de intentar conservar el Medio Ambiente", explicó.

Los técnicos de Ornitour -empresa contratada por la Refinería para desarrollar el programa- iniciaron el proyecto en 2009 con diferentes actuaciones. El director de la entidad, Pablo Barro, destacó lo atrevido de esta iniciativa al tratarse de un entorno bastante "antropizado" por la cercanía de la factoría, carretera A-7 y tendidos eléctricos. "Se demuestra que con un mínimo de cuidado se puede crear un santuario de vida", añadió.

Además, de las lagunas, Barro expuso la importancia del bosque de acebuchal, el gran olvidado y recién recuperado.

Junto a Segura una amplia comitiva de autoridades, entre ellos el subdelegado del Gobierno de la Junta, Ángel Gavino y ediles de Turismo de los municipios de la comarca, realizaron ayer el recorrido completo de la Estación Medioambiental, deteniéndose en los hitos explicativos.

Para la recuperación de hábitats perdidos, la actuación más importante ha sido la creación de dos lagunas, con una extensión aproximada de dos hectáreas, y dos charcas temporales, lo que ha propiciado la aparición de numerosas especies ligadas a este tipo de hábitats.

Ornitour comenzó en 2010 estos trabajos ligados a la dinámica del agua. Consistieron en captar el agua de las escorrentías llevándola a la laguna sur, una vez superada la cuota máxima, ésta pasa a un canal que la une con la laguna norte. Una vez superado el nivel, sale por otro aliviadero con dirección al arroyo de la Madrevieja cuyo resultado final ha sido las dos lagunas. Un gran número de mamíferos frecuentan estas lagunas, como las nutrias, jinetas, tejones, entre otros. También habitan anfibios como el sapillo pintojo, la ranita meridional, la rana común, el sapillo moteado o el gallipato. Este espacio también cuenta con la presencia de reptiles, como el galápago leproso, la salamanquesa común, el eslizón tridáctilo o la culebra de herradura.

En cuanto a la flora, destacarla recuperación de un gran acebuchal. Entre los trabajos realizados se incluyen la limpieza de este bosque existente en el pastizal y la plantación de nuevos acebuches. Posteriormente, en estos tres años se han plantado aproximadamente 12 fresnos, 250 tarajes, 300 lentiscos, 25 higueras y 100 sauces.

La joya de la corona es el observatorio de aves, junto al humedal de agua dulce, tanto por su interés científico como por el creciente seguimiento popular que tiene en el Campo de Gibraltar el estudio de las aves y su comportamiento migratorio.

A lo largo del sendero, los visitantes se encontrarán con paneles interpretativos, varios puentes en los cruces de agua y áreas recreativas.

El grupo Cepsa mantiene un "fuerte compromiso" con el entorno de aquellas zonas en las que desarrolla actividad. Ramón Segura recordó que el precedente a esta estación ambiental está en la laguna de Palos (Huelva).