La Real Balompédica Linense ya ha puesto rumbo a la Primera RFEF (Liga Pro). Tras consumar su ascenso deportivo y en espera de conformar su plantilla, la directiva que encabeza Raffaele Pandalone trabaja en la ardua tarea de dar un paso adelante en la profesionalización de la entidad. Uno de los objetivos es apuntalar la estructura del club con unos servicios jurídicos propios y la persona que más gusta para asumir la responsabilidad de gestionarlos no es otra que el linense Álvaro Pérez Bonmatí, que en la actualidad desempeña esas funciones en el Europa FC de la National League de Gibraltar.

La Balona necesita crecer para poder hacer frente a sus nuevos retos. Aquellos que sostenían que se celebraba como un ascenso lo que no era más que una permanencia no habían perdido un minuto en comprobar cómo será la nueva categoría en la que desembarca el equipo de La Línea y las numerosas exigencias que tiene.

Para hacer frente a esta situación Raffale Pandalone, que hasta ahora ha recurrido a asesores externos para asuntos tan relevantes como fue la implantación del ERTE el curso pasado, pretende que la entidad tenga su propia estructura jurídica y aunque de momento no hay nada cerrado, el perfil en el que se ha fijado no es otro que el del linense Álvaro Pérez Bonmatí, abogado, que realizó su tesis doctoral en torno a la relación laboral del deportista profesional.

Álvaro Pérez fue canterano de la Balona, participó en selecciones autonómicas y llegó a ser reclutado por el Sevilla FC para sus categorías inferiores porque apuntaba maneras como futbolista. Enamorado de este deporte, centralizó su actividad profesional posterior en torno al balompié y lleva varios años vinculado al Europa de Gibraltar, en el que ha adquirido una gran experiencia al amparo de las participaciones en competiciones internacionales del conjunto verdinegro.

En la temporada que acaba de finalizar Álvaro Pérez, autor de un interesante blog sobre relaciones profesionales de los deportistas, ha presenciado algún encuentro de la Balompédica en el palco del estadio Municipal. Puede tratarse de una mera coincidencia, con la buena relación entre Balona y Europa FC como telón de fondo, o de un indicio de lo cercano que se encuentra a un club del que siempre se confesó abiertamente seguidor.