Pepe Losada deja la Real Balompédica Linense con un "hasta luego” después de un año “sobresaliente por el ascenso a la Primera RFEF, aunque sin matrícula de honor, porque eso hubiese sido el ascenso a Segunda” y reivindicando el trabajo realizado desde la preparación física a base de datos: “Durante la temporada sufrimos nueve lesiones, mientras que el Real Madrid superó las sesenta y cinco”.

“Es cierto que muchas de ellas han sido traumáticas, porque han necesitado de operación… pero lesiones musculares si no recuerdo mal ha habido tres”, detalla Losada, que llegó de la mano del ya exentrenador Antonio Calderón y procedente de Irán. “Se ha hecho un trabajo bueno y la prueba es que en prácticamente todos los partidos el noventa y cinco por ciento de los jugadores estaban a disposición del entrenador y eso es el reflejo de un buen trabajo del cuerpo técnico y de los servicios médicos y eso me gustaría ensalzarlo”.

“Insisto, con los medios con los que contamos hemos hecho un trabajo muy bueno y ahí está el equipo que ha acabado, exceptuando los dos últimos partidos que la gente se relejó, a un nivel excelente”, matiza.

Losada explica que una vez empiezan a remitir los efectos de la crisis sanitaria generada por el Covid-19 le apetece “buscar nuevos retos” pero eso no impide que haga “un balance muy bueno” de su paso por el equipo de La Línea.

“Me quedo con lo positivo, que trabajamos muy duro desde el mes de agosto, que vivimos un final espectacular con el ascenso, superando a equipos que tenían mucho mayor presupuesto y plantillas que les obligaban a partir con más aspiraciones. Le sacamos el máximo los jugadores y ellos dieron un rendimiento... que queda reflejado en que la Balona estará la temporada próxima en la RFEF”.

“Como es lógico siendo de Cádiz yo conocía a la Balona y me encontré un cuerpo técnico muy profesional, al que aportan muchísimo la gente de la casa como Carlos Guerra y Juan Mari. Tanto ellos como Miguel Vega e Ismael Chico han sido unos pilares en el trabajo diario, sin olvidar al doctor, con Julio [en referencia al fisio, Julio Salvador Rivera], al gran Pepe El Masa, a Pipi [el utilero, Manuel Valenzuela]…”

El preparador físico desliza que rechazó tres ofertas en el mercado de invierno de clubes de otros países “porque estaba comprometido con la Balona y con Calderón” y que una vez se confirmó la salida de este último de la entidad de La Línea entendió que había llegado el momento de buscar nuevos horizontes “ya sea en solitario o junto a Antonio” [Calderón].

Losada sostiene que aunque en determinados momentos “la gente, incluso dentro del club, se pusiese nerviosa” en la caseta de los entrenadores reinaba la confianza. “Siempre estuvimos tranquilos. Sabíamos cuál era el camino y que las notas llegan al final. Parecía que después de perder con el Algeciras éramos los peores a pesar de nuestra segunda vuelta y después hicimos una segunda fase espectacular hasta que, como digo, inconscientemente nos relejamos”.

“Es curioso, pero cuando hablas con compañeros del Córdoba, del Badajoz… no paran de echarnos flore. Igual en La Línea no lo ha apreciado, pero la gente de fuera entiende que la temporada de la Balona ha sido espectacular”.

“Y que conste que me llevo una imagen inmejorable de la gente de La Línea, nos hemos sentido queridos, por mucho que, como en todos lados, siempre haya alguno que quiera sobresalir”, subraya para finalizar