Ocio
El tiempo para el puente en el Campo de Gibraltar

Juicio por el Rúa Mar: el pesquero se saltó la orden de salir siempre en grupo y se hundió en una zona en la que no tenía permiso para pescar

Los abogados de la defensa intentan trasladar la responsabilidad del naufragio sólo al patrón fallecido

"Él sabía lo que había ocurrido y que estaban muertos": la desgarradora acusación de un familiar en el juicio del Rúa Mar

Uno de los peritos declara este miércoles ante el tribunal. / Vanessa Pérez

El Rúa Mar, el pesquero cuyo naufragio sesgó las vidas de sus seis tripulantes el 23 de enero de 2020, se adentró en el Estrecho aquella noche de temporal en solitario, a pesar que tenía orden de la Capitanía Marítima de Cádiz de faenar siempre en grupo. Además, del testimonio de los peritos que se ha escuchado este miércoles en la sección de Algeciras de la Audiencia Provincial, se infiere que la embarcación se averió y luego se hundió en una zona en la que no tenía autorización para pescar. La investigación que realizó la Policía Nacional en aquellos años concluyó que en realidad no iba a eso, sino a embarcar una carga de aproximadamente dos toneladas de hachís, procedente de Marruecos, cuyo sobrepeso fue determinante en el hundimiento.

La sexta sesión del juicio por el caso del palangrero ha contado con las declaraciones, como peritos, de nueve personas, tres de ellos guardias civiles. Antes de eso, la defensa ha solicitado que se incluya en el procedimiento un documento que, cinco años y medio después, ha aparecido en un ordenador. Se trata de una lista de tripulantes que sí coincidiría con los nombres reales de los marineros fallecidos. Es decir, con los que iban en la embarcación. En la que consta hasta ahora no se encontraba el patrón del barco, Antonio Javier Maza, cuyo cadáver es uno de los dos que apareció flotando a los pocos días de la tragedia. La relación la ha encontrado Pedro Maza Rodríguez, histórico presidente de los armadores andaluces, hermano del patrón y de uno de los desaparecidos, Ángel, además de padre del principal acusado, el armador Pedro Samuel Maza Ruiz. El tribunal desestimó la inclusión de la lista por extemporánea y porque necesita que avance el juicio para comprobar su veracidad.

Pedro Maza Rodríguez estuvo esta vez en la sala. No dejó de tomar notas, habló con su hijo brevemente en un receso y, al terminar la sesión, pidió permiso para abrazarlo a uno de los policías que lo custodiaba tras su traslado desde la prisión de Botafuegos. "Rápido", le contestó el agente. Lo hizo unos segundos y se marchó.

El turno de declaraciones lo abrió un inspector de seguridad marítima que corroboró que la radiobaliza del Rúa Mar se activó tras sumergirse en el mar, no porque nadie la activara manualmente. El pesquero se encontraba en aquel momento "fuera de los límites permitidos para pescar en las costas españolas", tenía que faenar acompañado de otros barcos por una excepción realizada por la Capitanía Marítima y, sin embargo, se encontraba solo. En su interior había balsas de salvamento suficientes, aunque estaban caducadas, y no había constancia de defectos detectados en los 10 últimos despachos a que se sometió. Un despacho es la autorización que Capitanía Marítima realiza a los buques para atracar o salir de Puerto, tras verificar que cumple la normativa vigente. El hombre que realizó los últimos cuatro del Rúa Mar ratificó que "todo estaba correcto" cuando el pesquero se sometió a su examen para obtener permiso para salir y entrar a puerto.

Pedro Maza habla con su abogada en presencia de otro acusado en un receso. / Vanessa Pérez

Fue el profesional del servicio técnico de la empresa que confeccionó las balsas el que explicó que esa fecha de caducidad que habían superado (como una ITV) "no quiere decir que no funcionen". El caso es que no lo hicieron. Días después aparecieron las cajas, lo que a su juicio significa que el sistema saltó cuando estaba a dos metros bajo el agua, pero el cabo que las mantiene atadas al barco y que hace salte el mecanismo que las hincha, no funcionó. Lo más probable es que, dijo, estaban mal instaladas. De eso no se ocupa su empresa a menos que se lo pidan. Es el patrón el que debía haber comprobado su correcto funcionamiento.

El capitán marítimo de Algeciras en aquellos años, ya retirado, Julio Berzosa, explicó que realizó dos informes a petición del Juzgado Central de Instrucción número 6 de Madrid aunque en realidad su jurisdicción se limitaba al área entre Zahara y Punta de Chullera. Es decir, el Rúa Mar, con base en Barbate, no era de su competencia. Lo advirtió al juzgado, pero insistieron en que lo hiciera y los hizo. En estos documentos, Berzosa manifiesta que en los años previos a la tragedia no se recibió en Capitanía notificación de que iba a someterse a reparación o reforma alguna. En las primeras sesiones del juicio, la Policía Nacional confirmó que, durante la vigilancia a que sometió al pesquero, lo observó tapado con una lona en el varadero de Algeciras mientras alguien trabajaba en él, supuestamente para hacerle un doble fondo. También ratificó Berzosa que había "personal en la embarcación no enrolado" y que se encontraba fuera de la zona en la que tenía permitido faenar.

Policías nacionales presentes en la sala. / Vanessa Pérez

Los abogados de la acusación y de la defensa preguntaron a la mayoría de los peritos cuál es el máximo responsable de la seguridad de un buque, si el armador o el patrón. La respuesta es complicada. Si hay una es: los dos. Depende, dijeron algunos de los comparecientes. Cuando la embarcación está en el mar es el segundo, cuando está en el puerto, el primero. En parte en la respuesta a esa pregunta se determinará la responsabilidad de Pedro Samuel Maza Ruiz en el naufragio. La Fiscalía Antidroga de Algeciras pide 114 años de cárcel para él. Le acusa de delitos de homicidio (pena de 90 años), pertenencia a grupo criminal (2 años), contra la salud pública (12 años), estafa (1 año) y blanqueo de capitales (6 años), además de contra el derecho de los trabajadores (3 años).

El juicio del Rúa Mar vuelve este jueves con las declaraciones del forense y de peritos de sanidad y los que investigaron el supuesto blanqueo de capitales.

No hay comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último