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Algeciras ha sentido un poco como suyo el nombramiento del rey Alfonso XI como Hijo Adoptivo del municipio gallego de Neda, de cuyo astillero partió un barco que fue clave en la reconquista algecireña

Una vista de la fuente que se sitúa en el centro de la plaza Neda.
David Lendínez / Algeciras

30 de mayo 2010 - 01:00

Algeciras ha sentido un poco como suyo el nombramiento del rey Alfonso XI como hijo adoptivo del gobierno municipal de Neda, situado en el fondo de la ría de Ferrol, que apenas rebasa los 5.800 habitantes y que se distribuye en una superficie de 24 kilómetros cuadrados. Ambos municipios llevan años hermanados y cada uno recuerda al otro. Sus habitantes lo usan de manera cotidiana, aunque quizás no sepan el origen. En Algeciras está la plaza Neda y en Neda está la avenida de Algeciras.

El alcalde nedense, Ignacio Cabezón (Terra Galega), encabeza la iniciativa de su ejecutivo local de rescatar la historia de Neda, "un municipio que se contempla como si fuera una aldea de Ferrol cuando tiene más historia que cualquiera de la ría", declaró a La Voz de Galicia. Ya el año pasado se reconoció al poeta medieval Fernando Esquío y este año es el turno del rey Alfonso XI. "Por ser el que concedió los fueros reales a Neda en 1340".

Cabezón recuerda que fue un barco hecho en el municipio gallego el que rompió las cadenas en Algeciras durante la campaña del monarca por reconquistar el sur de España. El escudo de Neda representa un barco atado con unas cadenas.

La economía de Neda se vio favorecida por la concesión de estos fueros reales. En la Edad Media era una villa importante, en la que residían notables familias, aunque durante aquellos años fue conocida por su puerto comercial y su astillero, del que partió aquel barco que participó en la reconquista algecireña.

Alfonso XI de Castilla figura en la historia, entre otras cuestiones, por ser la persona que primero puso cerco a la ciudad y que luego conquistó. Entre sus títulos figuró el de Rey de Algeciras.

En 1342 llegaron a la ciudad las tropas de Castilla, Aragón y Génova junto a cruzados europeos y con el apoyo del rey de Inglaterra, de Francia y de la Santa Sede para tomar parte en esta batalla. Durante más de veinte meses los árabes resistieron el asedio ayudados vía marítima por los meriníes de Gibraltar.

El historiador Manuel Tapia recuerda que en aquella época era habitual cerrar los accesos por mar mediante toneles que flotaban amarrados por cadenas. Son las que cerraban el fondeadero en Algeciras, que no es lo mismo que el actual puerto. Tapia sitúa el fondeadero a la altura de la Aduana algecireña y matiza que el mar llegaba casi hasta la plaza de abastos. "La flota se concentró en la ensenada de Getares y desde allí primero hubo un desembarco y luego la Armada se dirigió al fondeadero". Las fuerzas marítimas se compraban con el dinero real.

El también historiador Antonio Torremocha informa en Breve historia de Algeciras que en enero de 1344 la ciudad quedó bloqueada por mar y tierra. "Un mes antes, el ejército de socorro enviado por los reyes de Granada y Fez fue derrotado en la vega del río Palmones. Sin esperanza de recibir ayuda exterior, los emires musulmanes enviaron parlamentarios al campamento de Alfonso XI con propuestas de rendición que fueron aceptadas por el rey de Castilla".

Relata que durante los más de 20 meses que duró el cerco, el emir Abu I Hasan envió a la ciudad vituallas, armas y dinero por un valor de un millón de dinares, y una vez rendida dio cobijo a los que quisieron pasar por el Magreb, concediéndoles casas, tierras o cargos en su administración.

Torremocha concluye que el 28 de marzo de 1344 llegó a su "ocaso el período más destacado de la historia de Algeciras, los seis siglos en que fue uno de los principales puertos de Al-Andalus y centro político, económico y religioso de la región situada al norte del Estrecho de Gibraltar". La conquista de Algeciras supuso la toma de la capital meriní en la península ibérica.

El Consistorio de Neda le ha enviado un escrito a la Casa Real y al Ayuntamiento de Algeciras informándoles del nombramiento. Cabezón explicó a este medio que entendió que era un buen momento para este reconocimiento por rendir una cuenta con el pasado y también para que la gente conozca este hecho histórico. "Conviene saber quiénes fuimos y a dónde vamos".

Esta real villa ha cambiado su fisonomía desde aquel periodo en el que había fábricas reales de pan, de galletas, de velas, de moneda y timbre. El astillero no existe, no entran barcos por el escaso calado y ha quedado principalmente como una ciudad dormitorio de ciudades como El Ferrol. La avenida de Algeciras es la arteria principal de Neda. Allí se sitúan el Ayuntamiento, la Casa de la Cultura y buena parte de las entidades financieras. El Consistorio está abierto a hacer un acto conjunto con el de Algeciras.

1344

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