Una escuela un tanto peculiar

Acrobacia, malabarismo, contorsionismo, aéreo y equilibrio son algunas de las asignaturas que se impartirán en una de las escuelas mas peculiares de Tarifa. La Asociación de Circo de Tarifa prepara una vuelta al cole muy especial con una oferta de estudios muy diferente a la habitual.

Y es que la asociación, que nació el pasado mes de junio, ha preparado toda una escuela de artes circenses para niños a partir de los cinco años que comenzará al mismo tiempo que el curso escolar. Mientras tanto ya han impartido varios talleres de distintas modalidades, como iniciación en telas y trapecio aéreos y uno de iniciación completo, que incluye clown (payaso), equilibrios y acrobacia. Para septiembre ya tienen previsto también otro de iniciación.

Markus Von Wachten y Sonia y Linda Burger son los socios fundadores de la asociación y los principales profesores de la academia. La idea surgió como una respuesta a la escasa oferta de ocio infantil que existe en el municipio, a lo que Linda y su hermana decidieron poner fin, a la vez que serviría de vehículo para mantener el oficio vivo.

A Linda le pareció "muy buena idea que los niños aprendan estas artes a la vez que adquieren otros valores asociados a la actividad como son el compañerismo, la solidaridad o la amistad".

Las hermanas Linda y Sonia, esto de las artes circenses lo llevan en la sangre. Son ni más ni menos que la séptima generación de su árbol genealógico que se dedica al oficio. Aunque puede que la continuidad peligre ya que el hijo de Linda quiere ser de mayor paleolontólogo, a pesar de que ya hace sus pinitos en el circo, confesó divertida su madre.

En pocas semanas los pequeños avanzan mucho en el dominio de las técnicas, algo de lo que los padres se sienten orgullosos y muy contentos, según cuenta Linda, quien añade que a los niños les encanta aprender estas actividades y que se divierten mucho.

La iniciativa ha sido muy bien acogida por los niños de la localidad, gracias sobre todo a la mejor publicidad de toda la historia, la que va de boca en boca. Linda cuenta que muchos de los asistentes son compañeros de colegio de su hijo. Tan bueno ha sido el resultado que incluso muchos adultos se han interesado por los distintos talleres que se imparten en el cole del circo. Linda destaca que uno de los beneficios de esta actividad es que mediante el arte del circo se desarrolla cuerpo y mente.

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