El cierre de las bibliotecas de la UCA llena las salas de estudio municipales

El uso de las bibliotecas en Algeciras, como lugar de estudio, es cada verano un tema envuelto en polémica. La utilización habitual que tiene la red municipal en torno al préstamo de libros durante el ejercicio anual pasa en los meses de verano a ser de auténtica sala de estudio. La Cristóbal Delgado, situada en el centro de la ciudad, está registrando llenos diarios, así como la biblioteca El Saladillo, que está recibiendo de forma excepcional a muchos jóvenes estudiantes, especialmente universitarios.

El cartel de cerrado que cuelga en las salas de estudio de la Universidad de Cádiz (UCA) ha motivado un trasvase de estudiantes del que se ha hecho cargo la administración local de forma natural. El cierre de la biblioteca de la Escuela Politécnica Superior de Algeciras en el mes de agosto ha generado cuanto menos un caos en las previsiones de muchos jóvenes, que se han visto obligados a buscar otros puntos de estudio bajo el desánimo de encontrarse en una localidad sin infraestructura suficiente.

Si bien, éste es un mal endémico para toda la provincia, ya que en la web de la UCA se informa que "de acuerdo a las medidas de responsabilidad en el gasto, aprobadas por el Consejo de Gobierno de la Universidad de Cádiz, se informa a nuestros usuarios que las Bibliotecas de la UCA cierran sus instalaciones desde el 1 al 31 de agosto". Emplazando así su regreso al 3 de septiembre para retomar su horario de apertura.

La crisis, tal y como se constata, también afecta a aquellos que simplemente quieren una mesa en la que estudiar. El año pasado el horario de la biblioteca de la Politécnica era de 9:00 a 14:00 horas, pero en previsión de la gran afluencia de estudiantes universitarios, se permitió mantenerla habilitada como zona de estudio hasta las 3:00 horas, ofreciendo de este modo un amplio servicio en verano que daba continuidad en la madrugada.

En los meses de julio y agosto a los estudiantes asiduos de los meses de invierno se le suma los jóvenes universitarios de Algeciras, que en verano regresan a la ciudad y necesitan prepararse para la convocatoria extraordinaria de septiembre. En 2011, de forma excepcional, la UCA contrató un servicio de vigilancia para mantener las puertas abiertos, pero este año el cierre ha pillado a los estudiantes por sorpresa.

Esta situación no ha dejado de generar grandes críticas por parte del sector estudiantil en las redes sociales. Algunos se preguntan por el dinero que pagan en las matrículas, "¿es para que nos traten de esta forma?". No ha sentado nada bien el cierre en la ciudad, lo que demuestra las duras críticas para aquellos que estudian en los meses de verano.

A su vez, al existir sólo la oferta municipal también se le apunta como dardo lamentando la falta de aire acondicionado en las bibliotecas, que unido a los horarios de apertura que se tienen demuestra la mala previsión que se hace para los estudiantes de este servicio. En redes sociales como Twitter esta situación es más que criticable: "una biblioteca con dos ventiladores en vez de aire acondicionado. Esto solo pasa en Algeciras", señala un usuario.

En cualquier caso, si no fuera por estas bibliotecas municipales los estudiantes ni siquiera tendrían un lugar. La Cristóbal Delgado en verano abre de 8:00 a 14:00 horas y de 15:30 a 21:00 horas. El resto del año es ininterrumpido hasta la noche. Según se explicó desde la biblioteca en estos días están registrando llenos de alrededor de 100 personas diarias, notando así la ausencia del servicio de la UCA. La biblioteca de El Saladillo también está recibiendo una inusual afluencia de jóvenes, aunque ésta ofrece un servicio de mañana. En el caso de La Granja, la llamada Pérez Petinto, es una dependencia más pequeña y se usa más para realizar talleres de fomento a la lectura, a la vez que comparte el espacio con servicios de Asuntos Sociales de la ciudad.