La ciudad de Tarifa demuestra una vez más que guarda gran devoción a su patrona, la Virgen de la Luz. Desde su llegada al templo de San Mateo, el pasado viernes, centenares de personas se han acercado a la parroquia para rezar ante la venerada imagen. 

Este domingo se ha celebrado la misa principal de la semana con la presencia destacada de la Virgen en el altar mayor y una multitudinaria asistencia de fieles y devotos. Luce el mantón verde y un crespón negro en memoria de todas las personas fallecidas por la pandemia de coronavirus. 

La iglesia de San Mateo ha ampliado el calendario de misas para permitir la máxima afluencia en los cultos con la Virgen a la par que se garantizan las normas de distanciamiento social para prevenir la expansión del coronavirus. El aforo se encuentra al 75%, unas 150 personas. 

El párroco de San Mateo, Juan Pedro Varo, ha explicado que de lunes a viernes habrá misa a las 10:00 y 20:00, con el fin de descongestionar lo máximo el templo durante los oficios y dar amplitud de opciones para acudir a la iglesia. Los sábados la misa es a las 20:00 y los domingos a las 10:00, 12:00 y 20:00.

El luto que luce la Virgen es una reproducción del que se utilizó en 1947 tras la explosión de Cádiz y tras el hundimiento del pesquero Los Mellizos. 

La imagen fue traída en rogativa en la madrugada del viernes, con el permiso del Obispado de Cádiz y Ceuta. Llegó sobre las cuatro de la madrugada en un cortejo muy reducido e íntimo, para evitar las aglomeraciones.

Su presencia en Tarifa, en un traslado y estancia sin precedentes ante la suspensión de la cabalgata agrícola del próximo septiembre, se prolongará durante varias semanas. Por ello, tanto desde el templo como desde la hermandad apelan a espaciar las visitas porque, apuntan, habrá tiempo suficiente. 

Medidas de seguridad

La parroquia de San Mateo tiene desde el inicio de la Fase 3 de la desescalada un horario de apertura de 9:00 a 13:00 y de 18:00 a 20.30 por las tardes. Durante este tiempo, además de las misas, los feligreses pueden acudir a rezar a la virgen.

El templo ha habilitado un itinerario circular en torno a la nave central para canalizar el flujo de entrada y salida de personas. Además, la zona de bancos centrales sólo puede ser utilizada durante las misas. El resto del tiempo permanece precintada aunque hay varios bancos habilitados en un lateral del altar. 

Como en cualquier otro espacio cerrado, es obligatorio el uso de mascarillas, hay gel hidroalcohólico y debe guardarse separación suficiente con otras personas.