José Antonio Hidalgo, director del Diario de Cádiz, nos informa que la capital gaditana ha retrocedido en población a la que tenía en 1958, que era de 113.066 vecinos. Así se refleja en el padrón municipal, que cifra en ese número los habitantes de nuestra ciudad. Por otro lado, al fin de la década actual, el padrón cuantificaba en 113.517 residentes. Y añade a la información que ha empezado a hablarse de un proyecto de relleno de la Bahía de Cádiz para conseguir 400.000 metros hábiles de suelo. El alcalde Carranza anunció también en su época la actuación sobre 100.000 metros cuadrados en el terreno cercano a la parroquia de San José "donde hay modestísimos, deplorables y anti higiénicas viviendas". Es el momento que el casco antiguo ya estaba colapsado con más de 60.000 habitantes y con barrios como parte de Santa María, la Merced, San Juan o la Viña. "Los chalés seguían mandando en la fisionomía de la Avenida donde se estaban levantando los primeros edificios en altura, en la zona más cercana en la plaza de la Victoria, junto al cementerio de San José". Subsisten una treintena que se concentran en Bahía Blanca y la Laguna. En 1958, el ayuntamiento de José León de Carranza estaba metido de lleno en la construcción de un paseo marítimo. El primer alcalde Carranza ya había planteado en la década de los años 20 un centro turístico en la glorieta Ingeniero la Cierva, con un hotel, un Casino y una piscina, de además de una zona de atracciones.

En 1958, la ciudad y su alcalde estaban nobsesionados con la construcción de un puente sobre la Bahía, que evitase el tiempo perdido al tener que bordear San Fernando y ya en 1958, se contaba con un proyecto diseñado por el ingeniero Antonio Duran y el plan lo aprobó el Estado para dar salida a un andén para peatones, dos calzadas para la circulación y una para el ferrocarril. El Estado español, no contribuyó y su coste tuvo que ser sufragado íntegramente por el municipio.

La población de Cádiz ha disminuido en 40.000 vecinos en menos de tres décadas, por lo que Cádiz se acerca cada día más a la cifra de 100.000 habitantes. En una década, dice el autor del artículo, que de mantenerse la tendencia actual se podría bajar de esa cifra. Con lo que se reduciría la aportación del Estado, que se fija según la población, aunque Teófila consiguió un plan especial, a pesar de la reducción del número de habitantes. Un buen trabajo para la reflexión, que es lo que nos sugiere el autor.