Las 1 rosas, el babi azul, cola del pan, las desbandás que nunca vuelven”, la posguerra de nuestras abuelas (tal vez, nuestras madres), aparecen en la combativa letra de María Peláe que se ha convertido ya en una firma candidata al Festival de Eurovisión. Remitente conseguía el segundo puesto en la reñida segunda semifinal del certamen.

El bolero de St. Pedro, Dos extraños, fue el ganador de la noche, el favorito del jurado. Y Jorge González, con Caliente, es el favorito del público. Entre ambos, María Peláe, poderosa en su interpretación de un tema que versa sobre la asfixiante lucha de las mujeres por tener su sitio en la ciudad. Las madres, las abuelas, “ración de leche, ración de pena”, “el velo negro”, “que tu pare no se entere”. Y también “sobró valor y mucho corazón” para que las hijas y las nietas tengan el lugar que se merecían. De eso, y más, va Remitente (la libertad). “¿Quién te dio la voz que te roban?”.

Las bulerías de María Peláe tienen el inconveniente de lo sucedido con Eaea, de Blanca Paloma, que en Eurovisión se vio con una puntuación exigua del televoto. Pero la reclamación flamenca de la malagueña da varios pasos adelante para posicionar de nuevo a los ritmos tan nuestros a poner un pie en Eurovisión. Y con una evocación trágica como la Guerra Civil.

“Las desbandás que nunca vuelven” alude a la masacre de la aviación rebelde sobre los ciudadanos de Málaga que huían por la carretera de Almería. Una tragedia tan sobrecogedora como el Guernica que no tiene cuadro, pero sí memoria. Y se va a recordar este sábado en la final del Benidorm Fest. Quién sabe si en mayo en Malmö.

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