Liberad al delfín listado

Si tuviera nombre, fuera una orca y viviera en un parque acuático, su historia sería muy similar a la de Liberad a Willy (Simon Wincer, 1993). Pero no, y su historia es quizá aún más dramática. Se trata de un delfín listado que vive en grupo en la Bahía de Algeciras y que, por avatares del destino o por la triste contaminación del mar, ha acabado con un aro de plástico en el morro que le impide comer. Hay todo un dispositivo de buzos, veterinarios y voluntarios preparados para que, en cuanto se le aviste, ir a por él para liberarlo. Y el tiempo apremia. Hace ya más de un mes que no puede ingerir alimentos.

Rocío Espada, de Dolphin Adventure y de la asociación Delfines del Estrecho, fue la que dio la voz de alarma al avistar al cetáceo con ese aro rojo que le cierra el hocico. Lo hizo el 6 de mayo y desde entonces, empresas, asociaciones y distintas administraciones colaboran para buscar la forma y el momento de liberarlo.

La jefa de servicio de Gestión del Medio Natural, Maru San Emeterio, explicó que desde aquel primer avistamiento se le está haciendo un seguimiento, se le ha visto en varias ocasiones y se sabe que vive en grupo en la bahía. "Creemos que cuando se le vio por primera vez hacía poco que llevaba el aro porque estaba bastante fuerte", contó la técnico, que dijo que el equipo decidió esperar a que se debilitara por la dificultad que suponía acercarse a un animal de este tipo, que tiene imagen de simpático pero que pesa 250 kilos. Tampoco se le puede dormir, porque está en el medio marino y si se le inyectan tranquilizantes se hundiría.

Así que en la espera, un equipo coordinado por la Junta de Andalucía se ha pertrechado con los útiles necesarios para abordar al cetáceo en cuanto se le vea. Pero hace días que no se le ve. La explicación puede no ser dramática, ya que la jefa de servicio contó que, normalmente, la llegada de grupos de delfines mulares, que son de mayores dimensiones que los listados, suele espantar a las especies más pequeñas residentes en la bahía.

"En cuanto le veamos, podemos estar allí en una hora. Tendremos dos embarcaciones para rodearlo y una red para atraparlo y quitarle manualmente el aro del morro, pero ahora mismo es como si buscáramos una aguja en un pajar", comentó San Emeterio, que dijo que cuentan con el barco de Dolphin Adventure, el del Servicio de Vigilancia Aduanera e incluso el de Salvamento Marítimo, si hiciera falta, para la noble causa de liberar al delfín listado.