La Enciclopedia de La Línea recoge en el tomo III las biografías de 329 personajes linenses o muy vinculados a la ciudad. Están representados casi todos los estamentos y profesionales. Contiene historias de literatos, pintores, docentes, sacerdotes, médicos, cantaores, cantantes, bailaores, compositores, músicos y toreros, además de psicológicos, locutores, deportistas y actores.

Guillermo Ruiz Marín (Empresario y ex concejal)

Nació en el año 1922, en la calle Clavel de La Línea, hijo de Andrés Ruiz Viedma, natural de San Roque, y de Concepción Marín García, oriunda de Córdoba.

Esta familia regentaba una farmacia en esa calle por los años veinte, donde nació Guillermo. Queda huérfano de madre desde muy pequeño, sólo tenía 11 meses, mientras que su padre fallece cuando aún Guillermo no había cumplido los 14 años. Después de pasar la niñez y parte de su adolescencia en La Línea, marcha a Córdoba a estudiar.

Terminados los estudios, regresa a La Línea con la intención de administrar los bienes paternos, haciéndose cargo de un cortijo que heredó en Guadiaro, el Cortijo Carlos. Una tarea poco fácil para un joven sin conocimientos de labranza ni ganadería. Para esta nueva tarea, Guillermo decide trasladarse a vivir a Guadiaro para tener cerca sus obligaciones. En esta barriada conoce a una joven, María Teresa Calama García, con quien estableció relaciones para luego contraer matrimonio, que se efectúa en el año 1946 y de cuyo matrimonio nacerían ocho hijos.

En Guadiaro, le nombran alcalde pedáneo y consigue muchas mejoras. Todavía se recuerdan las Cabalgatas de Reyes, los fuegos artificiales y espectáculos de buena calidad en la Feria así como las procesiones de Jesús el Cautivo y una Dolorosa, con su banda de música, todo ello en tiempos de la alcaldía de Guillermo Ruiz.

En 1958, decide trasladarse a La Línea con toda su familia. En el tiempo pasado en Guadiaro, ha conseguido tener en propiedad cuatro cortijos de tierras de labor con ganados y utensilios: los cortijos Carlos y La Viñuela fueron heredados. La Isla y El Gordo los heredaron sus tíos, pero Guillermo los gestionaba todos. Las dos primeras fincas fueron vendidas para invertir en otros negocios de mayor rentabilidad.

Establecido en La Línea, en el año 1960 solicita el reparto oficial del gas butano para toda la zona, que le fue otorgado, haciéndose cargo de este servicio y funda la empresa Rumagás (Ruiz Marín Gas). Más tarde se decide a montar una tienda de aparatos electrodomésticos en calle San Pablo, negocio que Guillermo desconocía por completo, pero que consigue el dominio total de este nuevo proyecto. Luego abre una tienda de deportes y se asocia a la comercialización del grupo de compras Intersport, entonces la mayor organización de toda Europa, con el nombre de Intersport Sponsor, el mayor organismo comercial de esta índole donde Guillermo es miembro reconocible.

También fue concejal de Festejos, donde presentaba los mejores desfiles callejeros, tanto por Feria como por Navidad y Reyes.

En los años sesenta, se empezó a organizar Asansull para la protección de los niños con discapacidad de la ciudad y comarca. Guillermo Ruiz, junto con otras personas de La Línea, comienza la tarea hasta que trae a María Luisa Escribano y al que después sería su marido, Felipe Cambres Trilla, junto a Manolo Alés y otras personas muy preparadas que se hicieron cargo de esta organización; aunque Ruiz no se desvinculó del todo de este maravilloso proyecto.

También fue partícipe de la Iglesia de Santiago y de casi todas las cofradías linenses. En la Flagelación fue hermano mayor. También fue socio del Círculo Mercantil, de la Unión Deportiva, del Tenis Club o de la Cruz Roja.

En los últimos años de su vida y con sus hijos situados y dirigiendo los negocios, Guillermo Ruiz paseaba por las calles del centro de la ciudad, charlando con los amigos y visitando de vez en cuando los locales comerciales que había creado. Falleció en La Línea el 22 de mayo de 2010.

Antonio Sánchez Rodríguez, Churrurú (Cantaor)

Cantaor profesional, nacido en San Fernando el 1 de julio de 1907. Llegó La Línea de la Concepción, donde se afincó, a finales de los 40.

Antonio Sánchez Rodríguez.

Tenía un estilo muy personal y dominaba casi todos los palos del cante, sobresaliendo por siguiriyas, saetas, tangos y cantiñas, que bordaba. Desde muy joven empezó a cantar buscándose la vida en los bares de la ciudad. En los años 40 actuó con el bailaor Fernando Torres y el guitarrista Antonio Pavón. De su magisterio aprendieron algunos aficionados de la comarca, entre ellos El Terry de La Línea. También Chaleco en una época antes de irse a Madrid hacía las cantiñas festeras de Churrurú.

Sobre el año 1968 trabajaba en la sala de fiestas Berrenchina junto con Brillantila, El Córdoba, Antonio Madreles, La Coreana y El Quino. En 1973, el rey Hassan II de Marruecos celebra fiesta en Rabat, donde acudieron Joaquín Jarrito, Churrurú, Antonio Córdoba, Antonio Perea y las bailaoras La Chata y su hermana Anita.

Dicen de Churrurú que fue un artista seguro, con harta facilidad para entrar en situación desde el instante en que comenzaba a templarse para cantar. Con su estilo personal y amplios conocimientos, se le abrían las puertas. En los recitales resultaba difícil para el aficionado inclinarse preferentemente por algún cante determinado porque su enciclopedismo le permitía, en cualquiera de ellos, dar la medida de sus posibilidades. Murió en La Línea en 1982.