Reino Unido confirma que duplicará el impuesto al juego online y pone en jaque el modelo económico de Gibraltar

El Peñón alerta de que la reforma fiscal, aún pendiente de aprobación parlamentaria, podría costar hasta 112 millones de libras anuales en un sector con 3.400 empleos

La mayoría laborista facilita la aprobación final, aunque el trámite no concluirá previsiblemente hasta finales de este año

El Gobierno de Gibraltar calcula una pérdida de 181 millones de euros si Reino Unido sube los impuestos a las casas de apuestas por internet

La zona de Midtown en Gibraltar.
La zona de Midtown en Gibraltar. / A. Rodríguez

El sector del juego online de Gibraltar, que supone cerca del 30% del PIB y emplea a más de 3.400 trabajadores, sigue con inquietud la reforma fiscal anunciada por el Gobierno británico. La medida, presentada este miércoles en el Parlamento por la ministra de Hacienda, Rachel Reeves, plantea elevar el impuesto sobre el juego a distancia del 21% al 40% a partir de 2026 y endurecer la fiscalidad de las apuestas online en 2027. Esta medida aún no está aprobada y deberá superar un proceso parlamentario que se prolongará durante las próximas semanas.

El Ejecutivo gibraltareño ha advertido de que la subida podría suponer una pérdida de hasta 112 millones de libras anuales (127 millones de euros) para la economía local. El comisionado de juego, Andrew Lyman, ha subrayado que cualquier modificación fiscal en Reino Unido “se amplifica en Gibraltar”, donde podría traducirse en cierres de sedes, recortes de empleo o traslados de operadoras a otros territorios.

La subida forma parte del presupuesto británico presentado este miércoles por Reeves, quien defendió que el juego remoto “está asociado a los niveles más altos de daño social” y que la reforma permitiría recaudar más de 1.000 millones de libras anuales hasta 2031. No obstante, el anuncio no implica aplicación inmediata: primero se ha aprobado una autorización fiscal provisional, pero los cambios deben pasar por las Ways and Means Resolutions del debate presupuestario y, después, por la Finance Bill, que debe recibir el visto bueno de los Comunes y los Lores.

La mayoría laborista facilita la aprobación final, aunque el trámite no concluirá previsiblemente hasta finales de este año.

Gibraltar y el sector presionan para introducir cambios

Mientras avanza el proceso, el ministro gibraltareño Nigel Feetham mantiene conversaciones bilaterales con Londres para buscar mitigaciones o alternativas que reduzcan el golpe para el Peñón. Las empresas del sector también han expresado su preocupación: algunas alertan de que el nuevo nivel impositivo puede resultar inviable para parte de las operadoras radicadas en Gibraltar.

El resultado final dependerá del texto que salga del Parlamento británico. Solo entonces Gibraltar podrá calcular con precisión el alcance de una reforma fiscal que, según todos los actores implicados, marcará un antes y un después en la principal industria del territorio.

Reunión de Picardo

El ministro principal de Gibraltar, Fabián Picardo, defendió la industria del juego del Peñón como “modelo de referencia” durante una reunión en el Tesoro británico con el ministro del ramo, Dan Tomlinson. Picardo destacó que Gibraltar ha superado los requisitos de transparencia y regulación y alertó de que el reciente aumento de impuestos al juego a distancia —del 21% al 40%— podría tener un impacto desproporcionado en los ingresos del Gobierno gibraltareño, afectando al impuesto sobre la renta, la seguridad social y el impuesto de sociedades.

El ministro agradeció que la reunión se produjera apenas un día después del anuncio de la medida y valoró la labor de Nigel Feetham, ministro de Justicia, Comercio e Industria de Gibraltar, en las gestiones previas al Presupuesto del Reino Unido. Picardo subrayó que la medida podría empujar a los jugadores del Reino Unido hacia el sector no regulado y afirmó que continuará los contactos con el Tesoro británico para tratar de modificar o mejorar la normativa. También recordó que la tasa finalmente aprobada es inferior a la inicialmente planteada por algunos activistas, que llegaba al 50%.

stats