Gibraltar desvió al aeropuerto de Málaga 118 vuelos de Londres en poco más de cuatro años

Algeciras/Gibraltar consumó el desvío al aeropuerto de Málaga de 118 vuelos procedentes de Londres en poco más de cuatro años, entre el 1 de enero de 2021 y el 20 de febrero de 2025, según una reciente respuesta del Gobierno central a la diputada del PP Ana Belén Vázquez.

El Ejecutivo asegura que en estos casos -generalmente vuelos desviados por causas meteorológicas- se cumplen con los requisitos de las inspecciones fronterizas para los pasajeros de acuerdo con el artículo 8 del Código de Fronteras Schengen. Aunque por norma general los desvíos están planteados para causas sobrevenidas y no por inclemencias meteorológicas (que son previsibles con los partes y predicciones de las autoridades), en la práctica las derivaciones por mal tiempo son recurrentes durante los meses de otoño e invierno.

El número total de vuelos que debían aterrizar en la colonia británica y que fueron finalmente desviados a Málaga en estos cuatro años y dos meses sería superior, porque la parlamentaria popular preguntó expresamente por la ruta Londres-Gibraltar, dejando al margen que existen conexiones aéreas desde Bristol y Manchester que también aterrizan en la Roca. Y como no fue materia expresa de la pregunta, el Ejecutivo tampoco se prestó a ofrecer esta otra información complementaria en su respuesta, emitida a finales del pasado marzo.

La problemática de los desvíos

Con una pista de solo 1.852 metros de longitud, azotado por fuertes rachas de viento y una orografía compleja, el aeropuerto gibraltareño presenta evidentes limitaciones que condicionan su utilización cuando el mal tiempo se hace presente en las previsiones meteorológicas. En teoría y únicamente bajo circunstancias adversas sobrevenidas, los vuelos programados con destino o despegue desde la Roca pueden ser suspendidos o derivados al aeropuerto o aeropuertos alternativos que deben aparecer de forma obligada en cada plan de vuelo. En el caso de los vuelos civiles que operan en Gibraltar suelen ser los aeródromos de Tánger, el más cercano al Peñón, y el de Málaga.

Cuando las inclemencias del tiempo hacen imposible aterrizar en la colonia, las compañías aéreas derivan sus aviones al aeródromo Pablo Ruiz Picasso de la capital malagueña, distante 124 kilómetros por autopista de la colonia británica. Eso les evita afrontar los altos costes de los pasajes en ferry –si los barcos estuviesen operativos– desde Tánger hasta Gibraltar y una burocracia más lenta. Si optasen, por contra, a cancelar el vuelo, deberían afrontar igualmente costes indeseables, al tener que devolver el importe de los billetes a los pasajeros o, incluso, pagarles comidas, alojamientos e indemnizarles.

En cualquier caso, solo hay una excepción admisible para que los vuelos de Gibraltar se desvíen a Málaga u otros puntos: cuando haya causas realmente sobrevenidas y exclusivamente por razones de seguridad aérea.

Esta operativa, sin embargo, obliga a España a afrontar retos en materia de seguridad en una doble vertiente: de un lado, la llegada imprevista de ciudadanos extracomunitarios al aeropuerto de Málaga-Costa del Sol obliga a la Policía Nacional a un sobreesfuerzo en el control de pasaportes y a la expedición, incluso, de visados a pasajeros de algunos países; de otro, el traslado por carretera de los pasajeros entre el aeródromo malagueño y la colonia británica abre la posibilidad, como así ha ocurrido en ocasiones, de que haya quienes aprovechen la ocasión para quedarse en territorio Schengen de forma ilegal; caso de cinco personas que el 26 de enero de 2025 no llegaron a la colonia tras aterrizar en Málaga. A este respecto, la respuesta parlamentaria especifica que sobre estos pasajeros (en teoría ilocalizados) "se les aplicará la normativa de extranjería".

Así son los controles a los pasajeros en Málaga

El Gobierno detalla en la respuesta a la diputada popular cuál es el procedimiento de control que se sigue para garantizar el cumplimiento de Código de Fronteras Schengen en caso de desviaciones de vuelos. Según la réplica, "la Policía Nacional realiza un control preliminar a pie de avión de los pasajeros para determinar los requisitos para entrar en territorio español. Si se detecta algún pasajero que carezca de requisitos, la compañía aérea se abstiene de presentarlos en la frontera y los mantiene a bordo de la aeronave para regresar con ellos al Reino Unido o, eventualmentea Gibraltar, vía aérea, cuando las condiciones meteorológicas lo permitan".

El resto del pasaje, chequeado previamente, se presenta en la primera línea de la frontera, en el caso de los ciudadanos de terceros países, entre los que se encuentran los del Reino Unido, se realiza la correspondiente inspección, comprobándose los requisitos y los documentos de viaje que porten, así como los billetes de avión y de cualquier otro medio de transporte, para cerciorarse de que efectivamente se dirigen a Gibraltar si proceden de un avión desviado. Una vez confirmado, y si por parte del puesto fronterizo se considera que los ciudadanos de terceros países inspeccionados reúnen los requisitos para continuar su viaje a Gibraltar, se solicita a la Unidad Central de Fronteras, si es necesario, la autorización para emitir una autorización excepcional de entrada o un visado en frontera, según lo requiera su nacionalidad, ambos por el mínimo tiempo indispensable.

En su caso, todo aquel pasajero de un tercer Estado que no cumpla con los requisitos de entrada en España, sea cual sea su nacionalidad, se procede a denegar la entrada, no cabiendo por norma la emisión de una autorización excepcional de entrada o de un visado en frontera, recoge el documento.

"Para garantizar que los pasajeros que llegan al Aeropuerto de Málaga se trasladen a su destino final, previsto en Gibraltar, se realiza comunicación entre los puestos fronterizos del Aeropuerto de Málaga-Costa del Sol y el de La Línea, comunicando todos los detalles del vuelo. En particular, se obtiene por parte del Puesto Fronterizo de Málaga, de la compañía, un listado de los pasajeros del vuelo y éste se remite al Puesto Fronterizo de La Línea, indicando tanto los pasajeros que entran en territorio español, como los que permanecen en la aeronave con el objeto del oportuno control. Paralelamente, la compañía aérea titular del vuelo desviado se responsabiliza del transporte de los pasajeros a La Línea contratando para ello los medios adecuados, verificándose en el Puesto Fronterizo de La Línea la entrada a Gibraltar desde el paso terrestre", concluye la respuesta.