Celebración

Los británicos son animados a festejar la coronación de Carlos III, un rey necesitado de popularidad

El rey británico, Carlos III

El rey británico, Carlos III

Londres se prepara para tres días de fiestas, celebraciones y acontecimientos oficiales en el primer fin de semana del mes de mayo. La coronación de Carlos III, su entronización, será una celebración que no se vivía en el Reino Unido desde 1953, cuando recibió la corona Isabel II, la madre del actual monarca, fallecida en septiembre.

El rey británico, necesitado de un empujón de popularidad, ha preparado con su equipo con todo detalle un momento en el que se quiere hacer partícipe al pueblo con todo el boato como dispone una ceremonia así.Los actos se iniciarán el sábado 6 de mayo con la llamada Procesión del rey, que parte desde el palaciode Buckingham hasta la abadía de Westminster a través de The Mall.

Isabel II en su coronación de 1953 Isabel II en su coronación de 1953

Isabel II en su coronación de 1953

En la carroza irá el rey su esposa, la reina consorte, Camila. En la abadía donde se han coronado sus antecesores y donde se han celebrado algunas de las ceremonias religiosas de la familia real el monarca, cabeza de la iglesia anglicana, y su mujer serán recibidos por el arzobispo de Canterbury.

El oficiante religioso dirigirá el solemne servicio de carácter espiritual en el que Carlos III recibirá la corona y los símbolos de su reinado, confirmando la ascensión al trono producida a raíz de la muerte de su  madre el pasado 8 de septiembre a los 96 años.

Tras la ceremonia, que se extendería durante unas dos horas, la comitiva regresaría al palacio en una nueva procesión con la presencia en distintos vehículos de toda la familia Windsor. En este caso queda aún en el aire si será invitado el príncipe Enrique y su mujer, Meghan Markle. Los duques de Sussex han despertadoresquemor en el entorno del rey y del príncipe de Gales, el hermano mayor, Guillermo, a raíz de la publicación de las memorias, En la sombra, y la extensión de nuevas declaraciones incómodas en sucesivas entrevistas.

Los duques de Sussex en una imagen de su docuserie Los duques de Sussex en una imagen de su docuserie

Los duques de Sussex en una imagen de su docuserie

Carlos de Inglaterra junto a su madre, Isabel II. Carlos de Inglaterra junto a su madre, Isabel II.

Carlos de Inglaterra junto a su madre, Isabel II. / M. G.

La procesión de regreso culminará con un saludo desde la balconada de Buckingham, con desfile militar. La jornada contará con actos familiares solemnes con los invitados más importantes llegados a Londres y habrá fiesta en las calles.

La fecha más musical será la del domingo con una gala especial que se retransmitida desde el castillo de Windsor, con “iconos de la música global y estrellas contemporáneas”. La BBC ofrecerá el festival para todo el planeta con figuras de primera línea, tanto de música clásico como comercial.

El Coro de la Coronación, selección de voces de agrupaciones polifónicas británicas (incluidos desanitarios de refugiados, en una representación de diversidad y solidaridad), amenizará con un concierto solemne y festivo en honor al monarca y su esposa.

Carlos de Inglaterra y Camila Carlos de Inglaterra y Camila

Carlos de Inglaterra y Camila / Getty

En el domingo también se dispersarán por el mapa de las islas, sus colonias y la Commonwealth las galas festivas con fuegos artificiales, drones y rayos láser. Los ciudadanos están invitados a celebrar la coronación en sus casas, a engalanar sus hogares y jardines y compartir la buena noticia, brindando en honor de Carlos III.  Desde el palacio también se hará distinción a los colectivos de voluntarios del país.

La jornada del lunes será día de fiesta en el país para continuar con otras celebraciones a lo largode las ciudades. El Reino Unido, en un mal momento social y político, se dispone a sacar su mejor sonrisa y optimismo a través de la ceremonia real.

"La coronación es un enorme hito en la historia del Reino Unido y la Commonwealth", señalaen un comunicado la ministra de Cultura, Michelle Donelan, que describe las celebraciones previstas en Londres y en las ciudades más importantes como "una mezcla de tradición y modernidad".

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