El colegiado Franco Cano, agredido por un delegado

El colegiado José Manuel Franco Cano fue brutalmente agredido en el partido de alevines que el pasado viernes disputaron el Casa y el Deportes Romero, de la Segunda Provincial, jugado en el recinto del Elcano, en Cádiz.

Según testigos presenciales, el choque se desarrolló con absoluta normalidad. El lío se montó cuando los dos equipos y el trío arbitral estaban en el vestuario, ya que en el interior del mismo se originó la trifulca en la que estaban implicados el colegiado, Franco Cano, y José Soto, padre de un jugador del Deportes Romero alevín que ese día, de manera ocasional, hizo las veces de delegado.

Según la versión de otro árbitro presente en el vestuario, Rodríguez Bilbao, fue Soto el que se presentó solicitando la devolución de su Documento Nacional de Identidad, lo que hizo con malas formas y agrediendo a Franco Cano, que, con contusiones, llegó a sufrir convulsiones, se tragó la lengua y tuvo que hospitalizado.