Un puerto de montaña menos y un punto más cerca del objetivo. El Algeciras CF sumó un empate ante el San Fernando CD en otra batalla de máxima exigencia. El equipo de Salva Ballesta se sobrepuso a un gol y acabó por minimizar uno de los ataques más temibles del grupo IV de la Segunda B. A base de carácter, de no perder la compostura y de creérselo, el conjunto albirrojo volvió a brindar al Nuevo Mirador un partido que alimenta las esperanzas del algecirismo antes del último tirón de la temporada, antes de la hora de la verdad en la que se decidirá la suerte de casi todos.

El Algeciras deja atrás su particular Tourmalet reforzado por los resultados (cinco puntos ante Cartagena, Córdoba y San Fernando) y, sobre todo, por las sensaciones. Por lo pronto, los de Salva Ballesta salen de los puestos de descenso con 29 puntos, aunque de momento solo sea por la diferencia de goles. Pero ya asoma la cabeza un equipo albirrojo que ha crecido mucho en el último mes y que ha experimentado un antes y un después tras su victoria en Córdoba.

Ficha ACF

El punto ante el San Fernando se antoja valiosísimo porque el Algeciras lo consiguió ante un rival que era superior libra por libra. Sin embargo, el fútbol gusta de desafiar la lógica y suele hacer guiños a los que se parten el alma. Este Algeciras ha entendido rápido que tiene que correr más, que sufrir más, que llegar más veces al área contraria para competir de tú a tú contra un oponente de la talla del San Fernando. Y hará bien en aplicar este credo también ante los Talavera, Villarrobledo, Mérida, Don Benito y compañía porque ninguno va a conceder nada.

El algecireño Francis Ferrón demostró en su vuelta a casa por qué es uno de los mejores delanteros de la categoría. Con muy poquito te hace un gol y además ahora juega con esa inteligencia que solo dan los años. La réplica llegó de otro algecireño, de un Antoñito que asumió la responsabilidad del ausente capitán para lanzar una pena máxima, un penalti por manos de Lolo Guerrero. Todo ocurrió antes del descanso aunque el segundo tiempo dejó ver a un Algeciras mejor que el San Fernando.

Salva Ballesta cumplió el primero de los tres partidos de sanción desde una de las cabinas de prensa. Sin él a pie de césped, con Enrique González frente a su hermano Alberto, el Algeciras no perdió un ápice de esa intensidad tan esperada. El técnico únicamente tocó el once para cubrir la sanción de Iván con el regreso de Yago Pérez. Hombre por hombre. Tampoco pasó factura la ausencia del imprescindible capitán algecireño. 

El Algeciras disfrutó de su primera llegada casi de salida, como viene siendo ya norma, con una clarísima ocasión que Karim no supo mandar a la red con un tiro cruzado. Tres minutos después fue el San Fernando el que tuvo la suya con un remate también dentro del área de Jorge García. Los dos habían salido abiertos, con ganas de marcha, pero fue el conjunto isleño el que golpeó primero en una acción de muchísima clase: corría el minuto 10 cuando Omar Perdomo desmontó el centro del campo algecirista con un solo movimiento, un giro en el que habilitó a Hugo Rodríguez en la izquierda, este centró al corazón del área y allí empaló el depredador que en su día vistió de rojiblanco. Francis Ferrón no perdona.

Los isleños demuestran calidad arriba hasta que chocan con la defensa albirroja

El Algeciras no se descompuso y en el minuto 15 Almenara peinó una falta lateral que obligó a intervenir a Rubén Gálvez. Sin embargo, se palpaba una superioridad de los isleños cuando encaraban el terreno algecirista. En dos toques, los de Alberto González eran capaces de montar un lío y casi lo hicieron en el minuto 34 cuando Gabi Ramos no aprovechó una contra de Hugo Rodríguez. Tres minutos después, otro escarceo visitante terminó con un tanto anulado a Omar Perdomo por fuera de juego. El pase de Ferrón había sido milimétrico. 

Los isleños estaban dejando con vida al Algeciras y eso casi siempre se suele pagar en esta categoría. Los de Ballesta insistieron desde las bandas con centros laterales de los que salían saques de esquina o algún balón rechazado con posibilidad de segunda jugada. En uno de ellos, Choco centró y Lolo Guerrero tocó con las manos. Penalti claro que Domínguez Cervantes no dudó en señalar en el minuto 42. Antoñito ejecutó con maestría con buena parte de los corazones algeciristas compungidos. El 1-1 era como un cañonazo con las palancas del electroshock. El árbitro no esperó ni al 45' para pitar el descanso.

Karim y Cuero tienen ocasiones y Borja Lázaro reclama otro penalti

El segundo tiempo arrancó con otra oportunidad de Karim, esta menos clara que la primera aunque sirvió para que el San Fernando activase su primer protocolo de emergencia. Los isleños, que chocaron con una defensa en la que sobresalió el algecireño Álvaro Benítez, cedieron terreno y balón. Ferrón se fue sustituido y ovacionado por la mayoría del Mirador en el minuto 62. Era una declaración de intenciones visitante. La última media hora tocaba matarse en el campo. Wilson Cuero casi engancha un pase de Martos en el área chica. El Algeciras se exponía, se arriesgaba porque veía posible la victoria.

Los últimos 20 minutos fueron de los locales, que abrieron la circulación con Martos pero no consiguieron conectar con Borja Lázaro, quien pudo sufrir un penalti en una balón disputado con Rubén Gálvez, las dos soluciones que salieron desde el banquillo. A poco del 90', con Bruno Herrero en liza, fue cuando el San Fernando volvió a asomarse con un par de acciones a balón parado que no llegaron a mayores. En los tres minutos de añadido apenas hubo sufrimiento porque todo el mundo había dado el empate por bueno.