Los albinegros se entrenan en el Mirador"Hemos tenido suerte, no nos ha tocado un coco"El San Fernando dice que no irá a Calahorra

Las peculiaridades del Anguiano, primer rival de la Balona por el ascenso a Segunda B, no terminan en su terreno de juego, de dimensiones muy reducidas y que no tiene grada, ni en que la plantilla resida y se entrene en Logroño. Su presidente, José Neila, es un empresario de la construcción que decidió fundar allá por 1999 el Club Deportivo Anguiano tras varios años de barbecho de fútbol en el pueblo, y antes de asumir el cargo ha sido entrenador, delegado y gerente del club. A principios de esta temporada accedió a la presidencia en detrimento de su prima, Daniela Fau.

El Anguiano tiene 60.000 euros de presupuesto, pero hay una pequeña trampa. "La Rioja es una comunidad pequeña y no hay un nivel fuerte en los equipos de la categoría, excepto los cuatro primeros. Los jugadores no cobran nada, pero se les da trabajo por jugar en el equipo", confiesa Neila.

Para el presidente del conjunto riojano, sus hombres ya han cumplido las expectativas que tenían para esta temporada, pero avisa de que una vez que han llegado aquí no van a regalar nada. "El salto de categoría tampoco es algo que busquemos con ansias. No tenemos mucha gente detrás y lo que hagamos ahora bien hecho estará. Eso sí, no renunciamos a nada, pero nos damos por contentos con disputar la liguilla".

Con esta frase define José Neila a su equipo: "Somos un equipo modesto y joven, aunque afrontamos la eliminatoria con ilusión, pero el viaje es muy largo". Tan complicadas son las combinaciones que existen entre Anguiano y el sur de España que el presidente aún no tiene claro como se desplazarán para el encuentro del domingo en el Municipal de La Línea.

Tampoco se sabe mucho de la Real Balompédica en el rival riojano, aunque ya están manos a la obra para que los albinegros no les pillen desprevenidos. "Lo único que sé es que el portero -David Pérez- jugó en el Logroñés, que tienen un estadio con capacidad para 20.000 espectadores y que allí nos esperarán siete u ocho mil personas que estarán apoyando a muerte a su equipo. También nos hemos encargado de pedir unos vídeos para ver que tipo de juego hacen".

Anguiano es una localidad de la sierra riojana que ha ido disminuyendo su población poco a poco durante los últimos años, pero recibe el apoyo de los anguianejos en el exilio de Lorgroño cada quince días.

La Real Balompédica se ejercitará esta tarde y mañana en el estadio Nuevo Mirador de Algeciras debido a la celebración de los Juegos del Estrecho en La Línea.

Para la ocasión se está instalando un escenario sobre el césped del estado linense, que será desmontado el sábado por la noche tras la celebración de la ceremonia de clausura para que el terreno de juego pueda estar listo para el partido del domingo ante el Anguiano.

El conjunto albirrojo ha cedido sus instalaciones al conjunto balono, ya que ayer celebró su último entrenamiento de la temporada.

No es la primera vez que la Real Balompédica tiene que ejercitarse fuera de La Línea para preparar una liguilla de ascenso. Ya lo hizo precisamente en Algeciras en la temporada 05/06, cuando un concierto en el Municipal impidió a los albinegros entrenarse en su casa. En la anterior también traslado por unos días su cuartel general a Marbella por el mismo motivo.

Así, los algecireños Isaac Luis Chico Copi y José Luis de la Paz Marín volverán a pisar el terreno de juego del que fue su estadio, al igual que los ex albirrojos Miguel Ángel Espínola y Noel Antonio Ruiz.

En los últimos años la Balona ha tenido que recurrir a otros campos en circunstancias puntuales. La ocasión más recordada y prolongada fue a finales de 1999 y principios de 2000, cuando los balonos estuvieron 61 días sin pisar el Municipal, cuyo césped tuvo que ser resembrado debido al pésimo estado en el que se encontraba. Además también se estaba preparando un campo alternativo de entrenamiento en la Ciudad Deportiva.

Los escenarios de las sesiones preparatorias fueron el viejo Mirador, aunque el Algeciras ya estaba instalado en el Nuevo, y la Residencia Tiempo Libre. Por entonces los jugadores que entrenaba Pedro Buenaventura se quejaban de que debido a los desplazamientos los entrenamientos se prolongaban una hora más.

El entrenador del Mirandés, Miguel Sola, afirma que esta temporada su equipo ha tenido suerte en el sorteo con el Santanyí y la Balona o el Anguiano en la última eliminatoria. "Hemos pedido una pizca de suerte en el sorteo y ahora debemos hacer el resto. Pienso que en los rivales que conforman nuestro grupo no nos han tocado los cocos".

Eso si, el técnico burgalés no quiere pensar en si le tocará en la última eliminatoria la Balona o el Anguiano, "porque es tan importante esta primera eliminatoria que no quiero hablar del resto de los rivales", afirma mientras prefiere centrarse en el primero escollo, el Santanyí. "No estoy descontento con el resultado del sorteo porque hemos evitado rivales muy fuertes, aunque eso no significa perderle el respeto al Santanyí, porque no será un rival cómodo".

"Se ha clasificado en un grupo complicado, tiene un campo de hierba artificial un tanto antiguo donde no es fácil jugar, pero pese al respeto también tenemos confianza en nuestras posibilidades de afrontar esta eliminatoria", señala el técnico rojillo.

Para adaptarse al terreno de juego del conjunto mallorquín, el Mirandés cambiará el escenario de sus entrenamientos durante la semana. "En el grupo balear hay mucha hierba artificial, con equipos técnicamente muy buenos, aunque tal vez adolecen de ese fútbol de fuerza y de ser agresivos. Creo que tienen una mezcla de jugadores de distintos estilos de juego".

El entrenador, a pesar del largo desplazamiento, espera que la afición ayude a su equipo. "Necesitamos a nuestro público vibrando y generando ese lastre al contrario, tenemos todos los condicionantes para subir y parte muy importante será el público", asegura.

La plantilla del Club Deportivo San Fernando estalló ayer y afirmó mediante un comunicado a los medios que si el club no hace frente a las cantidades que debe a los jugadores en 48 horas, el equipo no viajará a Calahorra para disputar el primer encuentro de la primera eliminatoria por el ascenso a Segunda B.

Los acontecimientos se dispararon a primera hora de la mañana, momento en el que los componentes del plantel isleño, entorno a las nueve y media, llegaban al vestuario sin conocer si el de ayer sería el día de pago, tal y como se les anunció.

Algo más de dos horas de reunión en el vestuario desembocó en la decisión de hacer pública la situación y de adoptar la drástica medida.

El capitán, Canito, aseguraba en nombre de sus compañeros, que les duele esta situación. "Lo sentimos de manera especial, por la afición, a la única que le debemos algo". Pero reconoció que han tocado fondo, que la situación es crítica y no les queda más remedio que tomar este camino.

"Hay parte del plantel que lo está pasando francamente mal. Han tenido que abandonar sus pisos de alquiler y no tienen, en muchas ocasiones, ni para comer. Muchos jugadores acuden a los negocios del presidente, Manolo Acosta, que nos ha ofrecido un sitio para poder comer", añadió.

En cuanto a la cantidad que se adeuda, Canito señaló que son "83.000 euros por cuatro meses, pero lo que pedimos es poder hacer urgentemente alguno de los pagos que los jugadores tenemos pendientes. Somos conscientes de las necesidades que tiene el club y del momento que está atravesando e, incluso, sabemos que se está buscando el dinero para el viaje del domingo y ya estamos a martes. Pero la gente y la afición tiene que comprender nuestra situación". Ante la posibilidad de un farol, Canito dijo que "es una decisión pensada. Esperaremos al jueves para terminar de tomar la determinación".

Durante la rueda de prensa ocurrió un hecho cuanto menos llamativo. Ante las preguntas realizadas a Canito, el entrenador del equipo isleño, Antonio Iriondo, dio un paso adelante en un claro gesto de protección hacia sus jugadores. Iriondo, que siempre ha sido muy comedido con la situación y que se encontraba tremendamente afectado en estos amargos momentos, señaló que "no es cuestión de negociar si se paga una o dos nóminas, es cuestión de valorar los momentos tan críticos que está pasando el plantel y, con esos problemas, hay que afrontar una fase de ascenso que es muy complicada". "Hay que tener en cuenta que los jugadores están muy afectados y eso se nota de una manera especial en el vestuario a la hora de trabajar".

Ángel Serrano, director general, también estaba tremendamente preocupado por la situación. "La recriminación de los jugadores no puede ser criticada y es normal que expongan los problemas por los que está pasando, pero estamos a la espera de quien tiene la posibilidad de poder pagar, que no es otro que Delfín Cañas, solucione los problemas para mandarnos el dinero", explicó.