Un admirador en el bando rival

Juan Carlos Castilla militó en la Balona en la temporada 2005-06, aquella que finalizó con la desagradable derrota en Zafra, a manos del Díter, que apeó a los albinegros de la fase de ascenso. Desde entonces se ha confesado en repetidas ocasiones un entusiasta del equipo de La Línea, casi un enamorado. Una condición que tendrá que abandonar mañana, siquiera durante un par de horas, cuando salte al terreno de juego del Municipal para defender la supervivencia en Tercera de su equipo, el Peñarroya, tratando de retrasar el alirón de los albinegros.

Castilla formó parte de aquella plantilla primero dirigida por Diego Rodríguez y más tarde por Gabriel Navarro 'Baby' que le llevó a compartir vestuario con, entre otros, Mingote, Nieto, Yeyo, Gregorio Molina, Jesule, Funes, Ricardo, Roberto Gómez, Diego López, Salamanca, Miguélez o Izco.

Eran otros tiempos, los suyos del profesionalismo. Ahora, con 35 años, comparte su vida laboral con el fútbol como segunda ocupación, y le hizo ilusión volver a Tercera, aunque fuese en un equipo que, como él mismo define "vive una clasificación complicada, porque no hemos sido capaces de remontar el vuelo. Es verdad que últimamente estamos siendo más competitivos, pero sumando de uno en uno, en esta Liga de tres, es muy difícil salvar la categoría".

"Tenemos una plantilla muy cortita, siempre falta alguien por una causa o por otra y así es difícil conseguir resultados y más cuando se necesitan tanto", reconoce. "La verdad es que todos estamos dando lo máximo y si algo tengo claro es que no vamos a salir derrotados en La Línea de antemano, al contrario, pensamos en el triunfo. Otra cosa es que nos salgan las cosas bien"

Castilla ya regresó una vez a La Línea como visitante, en concreto con el Lucentino, pero no jugó aquel partido de la última jornada, en el que la Balompédica de Raúl Procopio celebró la clasificación para la liguilla. "Siempre es bonito volver allí, porque tengo recuerdos maravillosos", dice.

"Nada más llegar te das cuenta de que existe un concepto equivocado de La Línea, por cómo te trata la gente, por lo que significa el club y por cómo se vive el fútbol en esa ciudad", agrega.

"Desde que me fui siempre me he sentido ligado a la Balona", recalca. "Siempre que venía a Córdoba y podía, me acercaba a ver los partidos y a saludar a la gente".

Castilla asegura que aunque no ha visto en acción a la Balompédica tiene "referencias" de la escuadra de Rafa Escobar. "Me hablan maravillas y no me sorprende, por algo va primero".

"Sabemos que tendremos enfrente a un equipo grande, con jugadores experimentados, pero a estas alturas cualquier equipo de la parte de abajo muere por dar una sorpresa", acaba. "La Balona ya casi es campeona y lo mismo le sucede como ante el Coria y nuestra motivación nos sirve para seguir agarrándonos a la categoría".