Óscar ¿por qué no te callas?

El entrenador granadino Óscar Cano está convirtiendo en una costumbre -que dice muy poco de él- faltar a la verdad en lo que se refiere a las actuaciones arbitrales, al menos cuando sus equipos se enfrentan a la Real Balompédica Linense. Lo hizo en enero de 2012 cuando el Melilla ganó en el Municipal con dos clamorosos errores arbitrales de por medio y después del partido del pasado domingo, en el que insinuó que la Balompédica había recibido ayuda del juez de la contienda, especialmente al conceder el segundo y tercer gol de David Hernández sobre el Betis B (2-3). Tanto hace un año como el pasado fin de semana las imágenes de televisión demuestran que las afirmaciones del ahora técnico del filial heliopolitano carecían de respaldo.

Veintidós de enero de 2012. La Balompédica pierde 0-1 a manos de la UD Melilla, que una vez más hace buena, merced a una lección de oficio, su condición de bestia negra del equipo de La Línea. Con independencia del juego desplegado por uno y otro equipo el partido estuvo totalmente mediatizado por la actuación del árbitro castellano-manchego Luis Collado López, de quien se escribía en este periódico: "Resuelve contra los de casa todas las jugadas polémicas e ignora un claro penalti por manos de Velasco con el 0-0".

Nadie puso reparos, sin embargo, a la pena máxima que dio origen al gol del triunfo visitante: "Francis en una acción infantil, regala la pena máxima", se podía leer en Europa Sur, que recalcaba que, como sucedió el pasado domingo, los de La Línea jugaron con un hombre menos desde el minuto 68' precisamente porque el lateral derecho vio la segunda cartulina amarilla. "El único lunar que tuvimos fue la acción del dichoso penalti", asumió el preparador albinegro, Rafa Escobar.

Dos decisiones fueron especialmente protestadas por los de casa. Una, un gol anulado a Juampe Rico en el 13' cuando partía claramente en posición legal y otra, unas manos de Velasco (43') que el trencilla no vio.

En rueda de prensa Óscar Cano dijo que ambas jugadas eran "dudosas" y que se ofrecía para, una vez vistas por televisión, volver a valorarlas. "No dudaré en reconocerlo si veo que en la mano existió voluntariedad y en el fuera de juego, porque ambas jugadas pudieron cambiar el devenir del partido".

Un día más tarde este periódico le localizó para valorase unas imágenes que no dejaban lugar a dudas. Cano, pese a lo evidente de la toma, aseguró que a él le quedaban "dudas" sobre ambas acciones y encima recalcó que el árbitro pudo perjudicar a los suyos. "Los únicos penaltis clamorosos son el que pitó y otro de Romerito a Velasco que dejó sin sancionar", adujo.

El domingo, después del partido, aseguró que el árbitro, el gallego Javier Iglesias Villanueva había tomado "decisiones de ésas que unas veces te benefician y otras te perjudican" pero que en el caso concreto del duelo disputado en la Ciudad Deportiva Luis del Sol "esta vez perjudican" a su equipo e hizo referencia a la decisión del colegiado de no aplicar la ley de la ventaja con 1-2 en el marcador cuando su delantero Sergio encaraba al meta balono Mateo, sin decir que se debía a que el atacante se encontraba en fuera de juego.

La legalidad del segundo gol de la Balompédica queda patente en la captura televisiva cedida a este periódico por José Manuel Fernández, redactor de Radio Atunara.