La Junta selecciona el proyecto de vías ciclistas que conectarán el término

San Roque es uno de los 52 municipios andaluces y uno de los ocho de la provincia de Cádiz seleccionados en La Ciudad Amable, un programa que traslada un modelo de actuación urbanística que genera nuevos puntos de encuentro ciudadano, resta espacio al coche y otorga mayor protagonismo al peatón.

La propuesta de San Roque, elaborada por el Ayuntamiento y escogida por la Consejería de Fomento y Vivienda está incluida en la categoría de vías sostenibles, que junto a islas ambientales y espacios habitables, son los tres modelos del programa.

Las vías sostenibles son proyectos de diseño de vías ciclistas que conectan lugares de residencia con centros de trabajo, ocio, comercio y actividades, un proyecto que San Roque incluye también en su plan de actuación de la Agenda Local 21.

La actuación en el municipio consiste en la conexión mediante carril bici del núcleo de la Estación y el carril existente que discurre por la carretera A-369, que a su vez conecta con el núcleo de Guadiaro a través del término de Castellar. Se quiere dar continuidad a esta vía y se constituiría como vía cicloturista alternativa al recorrido de los deportistas que actualmente optan por la ruta de Castellar como principal recorrido y destino.

El proyecto tiene carácter lineal y podría dividirse en cuatro tramos claramente diferenciados que discurren de manera paralela a la A-369.

La actuación se enmarca a su vez en una estrategia global de conexión mediante vía ciclista, cuyo objetivo principal es la vertebración de una serie de espacios urbanos, accesos a centros de trabajo y nodos de comunicaciones, de tal manera que la vía propuesta actúe a modo de eje potenciador y revitalizador de determinadas áreas urbanas de interés y puntos estratégicos de relevancia. En definitiva, se trataría de crear una vía ciclista que conecte un término polinuclear como San Roque y que a su vez lo interconecte mediante estos carriles con los municipios vecinos de La Línea y Castellar.

También se potenciarían otros proyectos de regeneración urbana, tales como aquellos relativos a la finca Los Russo en la barriada de Campamento o la antigua colonia de Puente Mayorga, así como la puesta en valor del área recreativa Madrevieja, zona que actualmente no dispone de un fácil acceso para niños y familias en bicicleta.

Igualmente, se facilitaría a largo plazo el transporte en bicicleta con otros medios de transporte como el autobús o el tren a través de la estación férrea actual y diversas paradas de autobús existentes, así como con el futuro intercambiador modal previsto en Taraguilla (intersección del eje motorizado de la autovía A-7 con el eje sostenible del Área de la Bahía)

Finalmente, se facilitaría el acceso en bicicleta al yacimiento arqueológico de Carteia, siendo éste uno de los atractivos culturales más importantes del término.

El proyecto, que tiene una inversión aproximada de 357.000 euros, plantea una alternativa de movilidad saludable a la potente área industrial. Además, se entiende como un motor de regeneración urbana que debería integrar en un mismo recorrido diversas tipologías de ciclistas.

La incidencia de la conexión ciclista en San Roque propiciaría claramente una serie de beneficios obvios, que irían más allá de una mejora en la movilidad sostenible.