Pepe Aguilar, entrenador del Cartagena B, se muestra convencido de que su equipo “no bajará los brazos” a pesar de su condición de colista del grupo IV de la Segunda Federación y que intentará repetir este domingo (12:00) “otro buen partido como el de Cádiz, pero con un resultado de triunfo” ante una Real Balompédica Linense a la que considera “diseñada para ascender” pero de la que entiende que “posiblemente” puede infravalorar al filial departamental debido a sus números.

“Afrontamos la visita de la Balona con el convencimiento de poder repetir el buen partido que hicimos la pasada semana con el Cádiz Mirandilla”, dijo el míster. “Nos enfrentamos a un equipo importante y queremos estar a la altura del mismo”.

El técnico, a la vista de sus estadísticas de la pasada semana (21 disparos, once de ellos entre los tres palos) sostiene que el filial departamental “tiene alma, fútbol y fe” y a lo largo de su conferencia de prensa repitió en varias ocasiones que su escuadra necesita “repetir esos buenos partidos” para salir de la última plaza de la tabla “pero con mayor recompensa que en Cádiz”.

“Queremos hacer el mismo partido, con un rival distinto como es evidente”, continuó. “La Balona es un equipo diseñado para ascender a Primera Federación o meterse en puestos de play off, pero yo estoy muy confiado, muy seguro en que nosotros vamos a hacer otro gran partido, pero que esta vez vamos a sumar tres puntos”.

Aguilar respondió con un “posiblemente” a la pregunta de si la Balona podría “infravalorar” al Cartagena B debido a su clasificación, afirmación por cierto que diametralmente opuesta a la opinión del entrenador de los de La Línea, Baldomero Hermoso Mere, quien el jueves en rueda de prensa ya había expresado sus máximos respetos por el filial del conjunto cartagenero.

“Lo que tengo claro es que cuando tú dejas de respetar al rival no te respetas a ti mismo y ese es un condicionante muy claro de que puedes no dar tu cien por cien”, continuó Aguilar su soliloquio.

“Ése es un problema que ellos pueden tener, nosotros nos aislamos de esa situación, porque el único pensamiento que tenemos es irnos con nueve puntos a estos días de descanso y volver con la misma energía y afrontar un 2024 estratosférico, porque mientras las matemáticas no nos digan que esto es imposible lo vamos a intentar”, abundó.

“Y si no logramos la salvación, tenemos que estar todos muy contentos de que la formación que hayamos podido dar a jugadores, eso supone una plusvalía para el club”, recalcó, con un visible tono de reproche.

El míster -que dedicó muchos minutos a repasar con detalle su trayectoria desde que llegó a la entidad en 2020 procedente del Rácing se Satander- recordó, en lo que se antoja a una defensa ante críticas externas que el Cartagena B es “un equipo filial” y que por lo tanto “ganar a cualquier precio no encaja” en sus principios.

“Es un sentimiento que tenemos todos los que conforman el club. Todos nos sentimos muy identificados con la manera en la que queremos hacer las cosas, con independencia de mi amistad con Paco Belmonte”, reivindicó en referencia al presidente de la entidad.

“Soy consciente de que en otro filial, con estos resultados hace mucho tiempo que estaría fuera, pero en este club, no”, recalcó con vehemencia. “Ojalá hubiésemos ganado muchos partidos en los que tuvimos esa posibilidad, pero a veces el fútbol no te da lo que mereces, pero seguimos trabajando, enseñando, formando”