El coordinador general de IU en Andalucía, Antonio Maíllo, negó ayer que su formación incorpore elementos de inestabilidad al pacto con el PSOE en la Junta de Andalucía, confirmó la voluntad de IU de seguir en el Gobierno con la "prioridad de resolver los problemas de la gente" y exigió a los socialistas que pongan fin al runrún de un anticipo electoral en la comunidad autónoma.

En rueda de prensa en la sede regional minutos antes de que la presidenta de la Junta, Susana Díaz, admitiera en Jerez una falta de estabilidad en su Gobierno (de la que responsabiliza a IU), Maíllo retó a los socialistas a explicar los motivos que obligarían a un adelanto de las elecciones andaluzas, cuando la legislatura finaliza en marzo de 2016.

Aunque la presidenta no especificó las razones, el secretario de Organización socialista, Juan Cornejo, apuntó ayer que esa falta de estabilidad se debería a "declaraciones desafortunadas" de dirigentes de IU, como el hecho de que "un líder de IU (Alberto Garzón) llamase indecente a la presidenta" en relación con la intención aplazada de Diego Valderas de viajar al Sahara y, sobre todo, a la decisión de IU de celebrar un referéndum en junio para evaluar el pacto de Gobierno en la Junta.

Esta última parece ser la base principal del relato de ruptura que Susana Díaz ya comenzó a escribir en agosto con la amenaza de un adelanto electoral si no se acordaban los presupuestos autonómicos. Entonces IU cayó en el desconcierto ante la estrategia de Díaz, pero ahora ha encontrado pronto una respuesta. Maíllo se escudó en "la palabra dada" , un argumento que ofrece tranquilidad moral a la coalición para un nuevo choque frontal con los socialistas, aunque sean conocedores de que el adelanto de las elecciones compete en exclusiva a la voluntad de la presidenta de la Junta.

"La estabilidad la da el cumplimiento de los acuerdos. Quien quiera un adelanto electoral tendrá que explicarlo. Tenemos un Presupuesto y políticas que desarrollar, y un acuerdo de Gobierno. A nosotros nos mueve la voluntad de hacer realidad las promesas a las que nos comprometimos hace tres años y no cumplir esas promesas es lo que lleva a que la gente desconfíe de los políticos", zanjó Maíllo, que dijo llevar una lista de programas de gobierno al comité de enlace con el PSOE convocado por la tarde y del que no hubo "nada que contar" a su término.

Para el coordinador de IU, en estos momentos no hay "razones de peso" que justifiquen un adelanto "que los andaluces no comprenderían". Caso distinto en su opinión hubiese sido hace unos meses con el caso de la Corrala Utopía, un hecho con posturas "incompatibles". La convocatoria de un referéndum en IU sobre el pacto no es razón para Maíllo, ya que "los mecanismos internos de nuestra organización los planteamos nosotros. Somos así y consultamos con nuestra militancia".

Maíllo tampoco entró a valorar si el embarazo de Susana Díaz influye en el posible adelanto electoral, aunque atisbó "intereses particulares" que no quiso concretar al ser preguntado. Maíllo informó de que felicitó a la presidenta con un mensaje de texto.