El cribado poblacional organizado por la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía este domingo en Algeciras ha detectado solo dos positivos entre el medio millar de personas que se han presentado a la prueba, la mitad de los 1.000 convocados por las autoridades sanitarias.

Los vecinos de Algeciras convocados habían sido seleccionados sobre una muestra aleatoria, seleccionada por criterio epidemiológico de incidencia de la enfermedad y representativa de la población. La realización de los test rápidos de antígenos era voluntaria y se ha realizado desde primera hora de la mañana en una unidad móvil situada junto al polideportivo Andrés Mateo. Estas mismas pruebas se realizaron ayer sábado en La Línea de la Concepción, donde se detectaron 15 positivos de 489 test realizados (acudió también la mitad de los convocados). 

El alcalde de Algeciras, José Ignacio Landaluce, ha considerado estos resultados "alentadores", recordando que "nos sirven para tomar decisiones sanitarias". El regidor ha instado de nuevo a la población a extremar la prevención, "tenemos que cuidarnos porque así cuidamos a los que queremos".

Este es el segundo cribado masivo realizado en Algeciras; el pasado 11 de diciembre se realizó otro en el que no se detectaron positivos tras 460 pruebas (y mil citados). No obstante, la situación epidemiológica ha cambiado, tanto que la Junta de Andalucía ha decretado el cierre perimetral de los municipios del Campo de Gibraltar desde este domingo hasta el próximo 10 de enero.

La medida la determinó el Consejo de Alertas de Salud Pública de Alto Impacto, tras analizar la evolución de los datos de la Covid-19 en la comarca, con fuertes incrementos en La Línea, fundamentalmente, que coinciden con los aumentos en Gibraltar tras descubrirse la nueva variante británica del virus, más contagiosa. Según los últimos datos (se actualizarán este lunes), la comarca presenta la mayor tasa de incidencia por 100.000 habitantes a 14 días en Andalucía, situándose en 316 casos (la media andaluza es de 140), con un nivel de alerta alto de presión asistencial en UCI. De ahí que se haya adoptado esta decisión para "evitar un crecimiento exponencial en los próximos días que pueda afectar de manera directa a la presión asistencial", aseguró el consejero de Salud, Jesús Aguirre, al presentarla.