La Trocha dice que la fábrica de fideos no reproduce la original

El presidente de la asociación La Trocha, Manuel Correro García, dijo ayer que trasladará al delegado municipal de Patrimonio Histórico, Diego González de la Torre, la consideración de este colectivo de que se han cometido irregularidades al reproducir la fachada de la antigua fábrica de fideos, en los números 18 y 20 de la calle General Castaños, esquina con calle Colón. Correro destacó que los edificios que ocupaban este espacio están incluidos en el catálogo de conjuntos, elementos, sitios y bienes de especial protección, en concreto de grado 3 en el capítulo de otros edificios de interés arquitectónico.

El presidente de La Trocha recordó que en el año 2004 se decidió en el transcurso de una Comisión Asesora de Patrimonio dar el visto bueno a la demolición de los dos edificios por cuestiones de ruina económica. En esa reunión, se acordó que cuando se construyera en el solar se debería respetar la fisonomía de la fachada, algo que en opinión de Correro no ha ocurrido. En el transcurso de dicha comisión, se decidió, dado su interés arquitectónico, que era imperativo reutilizar los elementos recuperables. El inmueble presentaba en su día una gran inestabilidad en su cimentación.

El proyecto presentado para la reproducción de la antigua fábrica de fideos fue aceptado al cumplirse los requisitos. En todo, salvo en la reproducción de un escalón, que había en la fachada y que los técnicos consideraron que era necesario puestos que originariamente se trataba de dos edificios adosados.

En concreto, Correro se refirió a elementos tales como la cerrajería de hierro forjado "de gran calidad" en balcones, cierros, persianas o soportes de canalones, así como cornisas y recercados de huecos con molduras y dibujos, o el capialzado de hueco central formado por una cornisa clásica con dentículos.

El responsable de La Trocha añadió que en caso de que no haya una respuesta por parte del responsable municipal, le pedirá que no se de licencia de primera ocupación. Correro destacó la peculiaridad de estas construcciones y, en concreto de los soportes de los canalones, "que no se han respetado", y que representan, según sus manifestaciones, un elemento decorativo muy peculiar en la ciudad.