Recordando "ese revoltoso cuarto C" del Kursaal

Hace prácticamente cincuenta años, pero los recuerdos de entonces están "frescos" en la memoria. Era el curso 1962-63 y hubo, especialmente, un profesor que les "dejó huella". David Ruiz, daba Historia, pero estuvo sólo un curso en el instituto Kursaal, pero aquellos niños de entonces le recuerdan con cariño.

Por eso, casi medio siglo después, le han querido rendir un homenaje. Durante la mañana de ayer, una amplio grupo de ex alumnos del instituto le arroparon mientras recorrían el centro, haciendo especial énfasis en el aula que les unió. "Decidimos un día organizar una comida de antiguos alumnos y nos acordamos de él porque dejó huella en nosotros y organizamos este viaje", explicó a este diario Jorge Páez, uno de esos ex alumnos.

Además de la cita en el IES, se le ofreció al profesor y a su esposa una comida en un conocido restaurante local, donde se le entregó una placa de recuerdo. Páez, prestigioso atleta, campeón mundial, europeo y nacional de Atletismo, y activista social de primera, recordó que en ese curso eran algo más de cuarenta. Ayer se reunieron 25 personas en su honor.

David Ruiz, actualmente catedrático emérito en Oviedo (Asturias), trasladó ayer su emoción por un acto "que no tiene precedentes", dijo. Recordó "ese revoltoso cuarto C", unos alumnos a los que la dirección de entonces estuvo a punto de expulsar en bloque. "Ellos me han recordado que yo, al parecer, había impedido llevar a cabo esa tropelía".

El destino quiso que la decisión de invitar al profesor coincidiera prácticamente con el interés que tenía el, según reconoció, en hacer un viaje, "de tipo sentimental", a Algeciras. "Casualmente tres meses después recibo la invitación de los alumnos de cuarto C, y se puede hacer una idea de la emoción que me embargó", dijo.

Para David Ruiz, cántabro de nacimiento, Algeciras, que fue su primer instituto tras las oposiciones, le marcó y "también, al parecer, les marcó a ellos". Aprovechó un concurso de traslado y se marzo a Oviedo para hacer allí la tesis doctoral. "Me marché con pesar porque estaba encantado en Algeciras, en el instituto y en la ciudad", añadió.

Para este profesor, Algeciras era "un oasis, prácticamente, en la España de entonces". Recordó lo nítido que se escuchaba la BBC, "lo que no ocurría en el resto de la Península". Incluso consideró que esta zona "era de lo más cosmopolita que había en la España de Franco. "Entre mis alumnos había, por ejemplo, los hijos del duque de Lerma", dijo, y recordó casos en los que como invitado en alguna casa tuvo la oportunidad de conocer a Anita Ekberg, la diva de Fellini en La Dolce Vita. El profesor es autor de varias obras literarias.