La Granja, de principio a fin
Los vecinos de la barriada hacen un recorrido por los puntos más conflictivos. Calles con el asfalto levantado, aceras intransitables o alcantarillas obstruidas son algunos de los ejemplos de sus quejas
Pasear por una simple acera o ir con la marcha del coche puesta en tercera por una calle de La Granja puede ser un auténtico gesto de "locos". Los continuos baches que adornan el suelo firme y la maleza junto a las farolas y los postes de electricidad obstaculizan el paso de un simple viandante, ya llevar un carrito obliga a circular por el asfalto.
Las asociaciones de vecinos de la barriada llevan mucho tiempo reclamando al Ayuntamiento de Algeciras por el estado de abandono en el que se encuentra sumida la zona. Los problemas se agudizan cada vez más con aceras intransitables o calzadas que simulan a una montaña rusa.
Dar una vuelta por La Granja, ya sea a pie o en coche, no es del todo agradable. La asociación Vista Mar completó un recorrido por las partes más defectuosas de la barriada parando en los puntos más conflictivos. Más de 53 calles conforman el lugar, no todas presentan deficiencias, pero sí la gran mayoría, especialmente el problema arranca en el deterioro de los puntos de alcantarillado, que se convierten en resaltos improvisados de la calzada.
La avenida Vista Mar, uno de los enlaces principales, presenta un acerado muy deficiente. Los postes de electricidad y las farolas, a su vez, hacen casi imposible que los vecinos transiten por la vía de forma regular. Los pasos destinados a los viandantes están levantados sobre terrenos arenosos, lo que se apunta como principal causa de la mala imagen que muestran. "Como no se mantiene tampoco, cada vez están peor", alerta uno de los vecinos. Además, el problema no queda ahí, los socavones que se crean se convierten en auténticas piscinas en invierno a causa de las lluvias.
Por otro lado, el alcantarillado también se muestra "abandonado". Las conducciones visibles para las aguas pluviales están, en muchos casos, obstruidas y no sólo por la maleza, la falta de mantenimiento es perceptible por las semiroturas que se observan. El abandono es tal en algunos puntos que hasta los restos de hormigón usado para levantar un paso de peatones elevado se hallaban tirados, cual vertedero improvisado, en una zona verde de la barriada.
Siguiendo el paseo por La Granja se llega a las calles Yuca y Amapola, el asfalto de las mismas está levantado, el paso constante de coches y camiones ha jugado en contra de la estabilidad del suelo. Así, también destaca el caso de la calle Trepadora, una vía en pendiente que tuvo que ser asfaltada por los propios vecinos y aunque su aspecto no es el mejor, al menos la buena voluntad de los vecinos se personifica en la misma.
Otro gran problema que preocupa a los vecinos es la falta de pasos de peatones en algunos puntos importantes, especialmente en la calle Benito Daza y la avenida de Las Flores, espacios que son muy transitados por escolares para llegar tanto el colegio Adalides como al IES Las Palomas. Si bien, como en las demás calles y con más razón, los vecinos lamentan el estado del acerado, tomado por la maleza, obligando a los jóvenes a hacer uso de la carretera para tomar su camino.
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