La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir ha respondido este jueves, a preguntas de este periódico, que el regadío de la cuenca podrá volver a tener el agua necesaria para una campaña de regadío normal cuando el año hidrológico sea húmedo. Esto supone que llueva tres veces más de lo caído hasta ahora entre octubre y diciembre. Según los datos del organismo estatal, las precipitaciones deben traer tres veces más agua de los 231 l/m² de media que hay ahora en los embalses de la cuenca. Con eso se llegaría al año húmedo que supone 700 l/m2 en los embalses.
Esta es la condición para salir de la actual situación de emergencia que derivó en el Decreto de Sequía, que afecta a los regadíos y obliga a ahorros en el abastecimiento, sin llegar a las restricciones de agua para beber. Los expertos aclaran que es importante que esa lluvia caiga sobre terreno húmedo para que vaya directa a los embalses y no sobre tierra seca que absorbería toda el agua.
Por lo que respecta a Emasesa, que abastece de agua potable a Sevilla capital y a otros 11 municipios, la empresa metropolitana ha explicado este jueves que los embalses están ahora al 45% (almacenan una media de 288 hectómetros cúbicos) y cuando alcancen el 50% de su capacidad saldremos de la alerta por sequía (310 hectómetros cúbicos) y entramos en prealerta (320 hectómetros cúbicos). Cuando se alcance este nivel se quedará sin efecto el bando municipal, pero seguirán en pie las recomendaciones de ahorro de agua.
La CHG explica que el Decreto de Sequía no especifica en qué momento exacto se puede salir de esta situación. "Hay muchos condicionantes que se tienen que dar para que se levante el Decreto. Uno de los principales es que salga de la situación de emergencia el llamado "sistema de regulación general", el que soporta la mayor demanda de la cuenca", aclara el organismo estatal. Ese sistema de regulación general abastece en su mayor parte a los regadíos.
La consejera de Agricultura, Carmen Crespo, calculó esta semana que son necesarias “diez semanas más” de precipitaciones para recuperar la capacidad ideal de embalse. “Andalucía necesitaría diez semanas más de lluvia para volver a la normalidad, ya que sigue en una situación complicada de sequía, con los embalses al 29%, es decir, dos puntos y medio menos que al inicio del año pasado”, por lo que “falta mucho para llegar a esa ansiada normalidad” que permita olvidar los recursos hídricos, ya que los embalses tienen 3.466 hectómetros cúbicos, 318 menos que hace un año.
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