La Cofradía del Santo Cristo del Consuelo, Nuestra Señora de las Lágrimas y San Juan Evangelista de Tarifa decidió quedarse en su templo ante la amenaza de lluvia. La salida del Consuelo estaba prevista para las 20:30, pero la decisión se aplazó hasta las 21:00. Pasados unos minutos la cofradía anunció que realizaría la estación de penitencia en la parroquia de San Francisco "por las inclemencias meteorológicas y con el fin de salvaguardar el patrimonio de la hermandad".

Decenas de personas aguardaban a las afueras del templo a la decisión de la junta de gobierno. El crucificado y la dolorosa son dos tallas a las que los vecinos guardan una gran devoción.

El crucificado, una valiosísima talla del siglo XVI, representa una de las señas de identidad de la tradición religiosa de la localidad. Hay constancia de que al menos desde el año 1537 se veneraba al Santo Cristo del Consuelo en la antigua Capilla de San Andrés, en la Iglesia de San Julián del Convento Trinitario de Tarifa, así como de la existencia de esta hermandad en 1722.