Tesoro de Gibraltar con tradición en las calles de San Roque. La Virgen de Nuestra Señora de la Soledad estaba a primeras horas de ayer casi preparada para iniciar su Estación de Penitencia. La tarde-noche del miércoles fue frenética para los hermanos de esta cofradía que se afanaban embelleciendo a la Dolorosa.

A pesar de no existir este año estreno, la imagen sí cuenta con nuevas caídas, aunque aún no están bordadas. El adorno floral como siempre es con flores blancas, calas y olveras, en su mayoría.

La cofradía cuenta con dos pasos. Uno que refleja el pasaje del entierro glorioso de Nuestro Señor Jesucristo, que cierra el desfile de la Magna, el Viernes Santo. El otro es el bonito y austero paso de palio, que sale los Jueves Santo en una procesión en silencio, de recogimiento y sin acompañamiento musical. La hermana mayor de esta cofradía, Mercedes Gavira, destacó que es un desfile de silencio y rezo, en la que los fieles son conscientes de lo que realmente se celebra esta noche. Como la imagen del Santo Entierro no sale hasta el Viernes Santo, son los costaleros de ambas imágenes los que se reparten para sacar a la Soledad por las calles del casco.

Además, los devotos de esta hermandad celebran también este año los 400 años de esta imagen, por lo que esta salida será aún más especial. Los actos para celebrar esta efeméride se realizarán después de la Semana de Pasión, ya que la junta de Gobierno ha considerado oportuno realizarlos durante la Cuaresma.

El recorrido de la Dolorosa que está previsto que salga cuando el reloj del templo marque la medianoche, discurre desde la parroquia Santa María La Coronada, Plaza de la Iglesia, San Felipe, Almoraima, Los Reyes, General Lacy, Colón, San José, San Nicolás, Rubín de Celis, de nuevo Plaza de la Iglesia y entrada en su templo alrededor de las 2:30 horas.

La Hermandad de Nuestra Señora de la Soledad procede de Gibraltar. Tenía su sede en el convento de San Francisco, donde actualmente se ubica el gobernador británico. Ambas imágenes, como otras muchas, fueron traídas por los exiliados gibraltareños que no quisieron separarse de sus raíces cristianas.

Hasta la desaparición de la cárcel del partido judicial de la ciudad, la Virgen liberaba a un preso en cada procesión, una tradición que aún se mantiene en otros puntos de Andalucía, como es el caso Málaga.

La Soledad es una de las imágenes señeras de la Semana de Pasión de la ciudad y junto con la procesión que le precede, la del Cristo Nazareno y la Virgen de los Dolores - el Santo Encuentro-, completa un Jueves Santo brillante en la ciudad, preludio de la Procesión Magna del Santo Entierro.