Con estas palabras solía firmar sus escritos nuestro amigo y compañero Quico Rebolledo, palabras que reflejan su esencia y que quedarán en el corazón de todos los que trabajamos junto a él.

Después de las palabras de mis compañeros destacando el aspecto humano y ambiental de Quico, donde se refleja acertadamente sus más de 30 años por buscar una sociedad más justa, solidaria y verde, ahora nos queda mirar al futuro y continuar manteniendo la llama que él encendió durante estos años con sus reivindicaciones y sus acciones en busca de un mundo mejor.

En estos días tan difíciles donde el corazón de nuestro amigo dejó de latir inesperadamente, en estos días donde las muestras de condolencia y pésame hacia su familia y compañeros de Agaden no paran de llegar, en estos días donde sus cenizas ya corren libres por su río mágico Hozgarganta de su Jimena natal, en estos días donde nos preguntan para cuando el reconocimiento para su persona y su lucha altruista durante toda una vida…

El mejor y comprometido homenaje que le podemos hacer ante los tiempos oscuros que se vislumbran –y que amenazan a los montes del Parque Natural de Los Alcornocales entre otros lugares de Cádiz– y que con tanta pasión defendió, es el de mantener vivo su compromiso ecologista, cuyo único objetivo fue el de proteger y mantener unos ecosistemas únicos e irrepetibles en una comarca y Provincia que siempre ha estado amenazada por graves agresiones ambientales, en los más de 42 años de activismo ecologista de su asociación.

Como presidenta y amiga, quiero en nombre de los compañeros que han mantenido y mantenemos la antorcha de la asociación, mandarte un mensaje de esperanza y decirte que allá donde estés, en las limpias y claras aguas de tu río favorito o surcando el Estrecho donde continuar siendo un rebelde con muchas causas por las que luchar y sin miedo, que vamos a continuar con tu lucha ante los retos que el futuro más cercano ya nos está poniendo en el horizonte.

Siempre te recordaremos. Tus amigos y compañeros de Agaden.