Ni escarlata, ni letra, ni nada

Comedia romántica, Estados Unidos, España, 2010, 92 min. Dirección: Will Gluck. Guión: Bert V. Royal. Fotografía: Michael Grady. Música: Brad Segal. Montaje: Susan Littenberg, Yana Gorskaya. Intérpretes: Emma Stone, Penn Badgley, Amanda Bynes, Dan Byrd, Thomas Haden Church, Patricia Clarkson, Cam Gigandet, Lisa Kudrow.

Viendo algunos programas de la televisión norteamericana y la mayor parte de su cine actual, no parece que la sociedad de la MTV, Fear Factor (otra basura escupida desde los Países Bajos a los Estados Unidos y desde allí regurgitada sobre nosotros), Jackass o Sexo en Nueva York, por citar diversas formas de hacer el burro o el tonto, nadie diría que el principal problema de los Estados Unidos sea el auge de la severidad y el rigor puritano.

Sin embargo Will Gluck parece pensar lo contrario y ha decidido hacer una adaptación a su universo -que es el de las películas guarronas y memas ambientadas en institutos- nada menos que de La letra escarlata de Nataniel Hawtorne, espléndida recreación de la intolerancia en la Nueva Inglaterra puritana del siglo XVII.

Claro que se trata de un pretexto publicitario para hacer pasar esta peliculilla rebosante de humor grueso por algo más de lo poco que es. Invéntese un enemigo puritano, dígase que se muestra la estupidez para denunciarla y las guarradas como canto a la libertad de expresión y ya tendrá la película a su favor a ciertos críticos que no le dedicarían un minuto sin estas coartadas. No cuela.