Narcotráfico
Los narcotraficantes recuperan por piezas las lanchas incautadas por la Guardia Civil

"Tener una idea preconcebida de lo que es la música es una estupidez"

Mastretta actúa esta noche en Algeciras por primera vez en su carrera artística · La emblemática banda de fusión tocará sus temas más celebrados en la sala Gramola, a partir de las 23.30 horas

Nacho Mastretta.
Pablo Bernardo Caveda / El Puerto

31 de marzo 2012 - 05:00

El éxito de crítica y público de Mastretta se entiende mucho mejor cuando se escucha hablar a Nacho Mastretta, que sólo tiene palabras para sus compañeros y para la música entendida como comunión y apertura de campos expresivos. Hoy, a partir de las 23:30 horas en la sala Gramola de Algeciras, la banda de fusión interpretará con nuevos arreglos sus temas más celebrados, que le han valido infinidad de premios, reconocimientos y giras por todo el mundo.

-Habitualmente definen su música como "fusión". ¿Le ve sentido a esta etiqueta o cree que es sólo una manera de agarrarse a algo cuando se habla de Mastretta?

-La cosa es que nos nombren y que hablen de nosotros, que es lo más difícil. Que lo hagan con una etiqueta u otra me da exactamente igual. Lo importante es que la gente pueda escuchar nuestra música y vernos en directo, que es donde realmente se puede apreciar lo que hacemos, y volverse a casa con una experiencia musical que comunique cosas que no se pueden comunicar con un libro o un poema.

-Antes de Mastretta trabajó como técnico de sonido para la Sala Sol. ¿Cómo determinó ese periodo su carrera?

-De técnico siempre he trabajado, porque desde pequeñito teníamos estos estudios de cinta y aprendíamos cómo se hace una mezcla, cómo conseguir sonidos… Creo que es una cosa que los músicos, y ahora más que antes, necesitan manejar. Y gracias a eso pude trabajar en Madrid como técnico de sonido durante los años noventa. Para mí fue una escuela maravillosa porque no sólo aprendí los rudimentos de la mezcla en directo, además estaba en contacto con los músicos. Estaba muy metido en la escena independiente de Madrid, que pasaba toda por la Sala Sol, y fueron unos años estupendos. Había un muy buen ambiente gracias a Antonio Gastón, que acaba de fallecer y al que quiero recordar porque era una persona maravillosa que ha hecho muchísimo por la música en Madrid.

-¿Creó Mastretta con una intención concreta, para dar cabida a unas ideas determinadas, o fue un cajón de sastre en el que fue metiendo cosas?

-No, yo nunca he hecho un proyecto con una idea conceptual. Las ideas salen de la experiencia musical misma, de las personas con las que te relacionas, de la música que vas escuchando. Por eso fue tan importante lo de la Sala Sol. La mejor manera de ser crítico con tu arte es asistir a teatros y conciertos, ver películas, leer libros y relacionarte con la sociedad en la que vives, con los artistas de tu generación. Contrastarte con ellos y compartir ideas. Tener una idea preconcebida de lo que es la música o su perfección es una estupidez. Hay que saber qué debe estar cerrado y qué debe estar abierto para que te sorprenda. Si todo está cerrado no hay libertad, no sucede nada. Y eso es lo que me interesa: cómo lo hacemos sonar entre todos, la importancia de la interpretación sobre la parte escrita.

-Mastretta ha hecho música para cine o anuncios: ¿Es sencillo cambiar el chip cuando se trata de música para un formato u otro?

-Es muy inspirador. Tienes que plantearte parámetros que no te planteas cuando la música es puramente musical. Con el cine, que es lo que más he hecho, aprendes nuevos registros, cosas que ni te habías planteado. Cómo expresar una transición del día a la noche, cuestiones psicológicas o emocionales de los personajes. Son cosas que te hacen buscar recursos con los que nunca habías pensado en trabajar.

-De hecho le iba a decir que lo que más me gusta de Mastretta es su capacidad evocadora. ¿Cómo es capaz de coger una sensación y darle una forma sonora?

-Creo que hay unos antecedentes que se remontan al teatro griego o incluso antes. La música siempre ha estado asociada a celebraciones de eventos o a fiestas. Siempre ha tenido un uso sagrado o práctico, como para ayudar en la siega. No he inventado nada. Lo que pasa es que ahora predomina un sistema educativo que prepara las cuestiones prácticas y abandona todas las cuestiones espirituales, que son las que de verdad importan. Se deja de lado cómo funcionamos con la música, por ejemplo, cuando ésta te enseña a funcionar en pequeñas sociedades, en pequeñas familias; la importancia de todos, no sólo del cantante. ¿Qué es lo que ha pasado? Que la música instrumental ahora no se escucha. Los medios de comunicación sólo la usan como soporte, por ejemplo, para una entrevista, y así la empobrecen.

-¿Por qué han decidido arreglar nuevamente el disco cuando estaba tan bien cerrado?

-No, la música tiene que estar viva. Eso es fundamental. Lo que no puedes hacer es tocar una canción siempre igual porque te aburres. El año pasado, sólo con la orquesta, hicimos setenta y cinco conciertos; así que para que tenga sentido subirnos a un escenario tenemos que plantearnos retos, abrir los temas, optar por la improvisación para que nos emocionemos y así llegar mejor al público, tener un estado continuo de alerta en directo. Lo que más importa es el nivel de escucha que tenga uno con respecto a lo que hacen los otros músicos de la banda. Tu capacidad como intérprete se ve multiplicada si escuchas a los demás. Y por eso te decía que es tan importante la educación musical, porque te enseña a escuchar al otro.

No hay comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último